España pide prudencia a la UE en las concesiones agrícolas marroquíes

Por esta razón, el ministerio que dirige Miguel Arias Cañete trata de evitar que se precipite un acuerdo bilateral y ha trasladado a Bruselas la preocupación de los agricultores españoles ante la entrada de frutas y hortalizas de Marruecos en los periodos en que España es el principal proveedor de estos productos en la UE, es decir, entre octubre y marzo. No obstante, fuentes del departamento subrayaron que el Gobierno español no ha ejercido presiones sobre el Ejecutivo comunitario porque no tiene potestad para ello, «dado que un país de la UE no puede instruir a ningún miembro de la Comisión en ninguna de sus actuaciones». En cualquier caso, insistieron en el compromiso del Gobierno de propiciar el diálogo entre los productores españoles y marroquíes para que los procesos de comercialización no se solapen y generen alteraciones en los precios. La Comisión Europea y el Gobierno marroquí manifestaron esta semana su intención de acelerar las reuniones sobre la renovación del protocolo agrícola con el fin de acabar las negociaciones a finales del próximo mes de febrero. Rabat ha reclamado un aumento de las exportaciones agrícolas a cambio de la entrada de productos continentales como leche o cereales, al tiempo que ha augurado «largas negociaciones» para cuadrar detalles técnicos relacionados con «determinados productos incluidos en la regla de reciprocidad prevista en el Acuerdo de Asociación». Por su parte, Bruselas advirtió con anterioridad que asumía que Marruecos pidiera un aumento de las exportaciones de tomate. Según la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), el Reino alauí espera incrementar de 168.000 a 215.000 toneladas el contingente de envíos. En protesta por la dirección de las negociaciones del capítulo agrícola entre la UE y el Reino alauí, productores de tomate en Almería estudian el bloqueo de envíos marroquíes en diversos puertos andaluces.