E.on se ve dueña de Endesa con las nuevas condiciones del Gobierno

E.on ve el camino despejado. El presidente del grupo alemán, Wulf Bernotat, mostró ayer su convicción de que los accionistas de Endesa podrán acudir a su oferta de 35 euros por acción antes de final de año, con lo que su compra quedará cerrada a principios del 2007. La decisión del Gobierno de dar marcha atrás y permitirle quedarse con todos los activos de la eléctrica ha dado alas a la operación, según reconoció. Pero todavía queda por desvelar cual será la actitud de Gas Natural y Acciona, con las que el directivo alemán se declaró dispuesto a «colaborar y negociar». Bernotat desveló que la empresa energética alemana tiene previsto presentar a finales de esta semana la versión definitiva de su opa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y se mostró confiado en que el regulador apruebe su folleto durante la semana siguiente. El presidente del organismo le garantizó desde Zaragoza que esa aprobación será «cuestión de días». El directivo germano hizo un llamamiento a todas las partes implicadas a dar los pasos necesarios para permitir que los accionistas decidan lo antes posible. «Ya han esperado demasiado», lamentó. En principio, y pese al visto bueno del regulador, la oferta de E.on estará bloqueada por la paralización judicial de la de Gas Natural, ya que las dos deben llegar al mercado al mismo tiempo. Sin embargo, los gestores de la eléctrica ya han anunciado que reclamarán ante los juzgados la retirada de las cautelares cuando la opa alemana reciba la luz verde. Además, la compañía catalana podrá retirar su oferta en el mismo momento en que la del grupo germano sea aprobada, algo probable si se tiene en cuenta que su propuesta es un 54% inferior. Pese a que la CNE ha dado permiso a Acciona para alcanzar el 24,9% de Endesa, Bernotat se mostró convencido de que la eléctrica tiene suficientes títulos en el mercado como para que triunfe su opa, condicionada a obtener el 50% del capital más una acción, lo que le permitirá retirar sus blindajes. Muy optimista, el directivo alemán descartó que se vaya a producir una alianza de intereses españoles para entorpecer el éxito de su oferta. Y recordó que Acciona así lo ha comprometido en la documentación remitida al regulador de los mercados de Estados Unidos. Los inversores compartieron el diagnostico positivo realizado por E.on tras los cambios adoptados por el Ministerio de Industria. En una Bolsa eufórica, las acciones de Endesa se apuntaron un 1,19%, hasta cerrar a 35,75 euros, y en algunos momentos llegaron a superar los 36 euros. Bernotat achacó estas alzas a «movimientos especulativos» y descartó de forma tajante un incremento de su oferta. Negociación El presidente de E.on suavizó el tono crítico contra la constructora de la familia Entrecanales y se mostró dispuesto a negociar con ella si permanece en el accionariado una vez concluida su opa. «Es evidente que nos sentaremos a discutir con un accionista de esa importancia», subrayó. También se declaró dispuesto a negociar con Gas Natural, aunque subrayó que para ello será necesario por motivos legales que la gasista retire previamente la oferta. «Podemos hablar con ellos de cooperación dentro y fuera de España», dejó caer. La comparecencia de Bernotat ante los medios españoles evidenció un cambio de actitud ante sus competidores para hacerse con Endesa. Así, el ejecutivo restó importancia al procedimiento judicial que ha impulsado en Estados Unidos contra Acciona, y en contra de lo sostenido en su demanda, negó que el Grupo Santander haya podido incurrir en un conflicto de intereses. También se mostró convencido de que no tendrá éxito la investigación abierta por un juzgado de Barcelona por un supuesto intercambio de información privilegiada entre E.on y la acutal dirección de Endesa. Planes para Endesa Bernotat aprovechó la ocasión para desvelar parte de su estrategia para Endesa. La compañía, según apuntó, será dirigida por personal español y la estructura de gestión no se alterará en exceso. Precisó, eso sí, que no se ha suscrito ningún compromiso «individual», con lo que dejó la puerta abierta a una posible salida de su presidente, Manuel Pizarro, y su consejero delegado, Rafael Miranda. Tras superar muchas trabas, el grupo alemán se ha propuesto lanzar un mensaje conciliador con el Gobierno, los reguladores y el resto de agentes españoles. Su presidente se comprometió a crear una «plataforma de confianza y respeto mutuos» con las autoridades y pidió que se les acepte como un «socio cooperador y constructivo». Sostuvo que la integración de la eléctrica en el grupo alemán permitirá incrementar la muy escasa interconexión de la red española, afirmó que E.on posee la fortaleza financiera suficiente para mejorar con «importantes» inversiones las infraestructuras energéticas y destacó sus contratos a largo plazo de suministro de gas con Rusia.