ENLACE REAL
Holanda se prepara para recibir a los reyes Guillermo y Máxima
Felipe y Letizia asisten a la cena que la reina Beatriz ofrece esta tarde a las casas reales de todo el mundo
Dos mujeres con sombrero naranja asisten a los preparativos de la ceremonia de llegada al trono del rey Guillermo.
La realeza europea está obligada a mirar a Holanda. Por poco, quizá, que le apetezca. El Reino de los Países Bajos tiene todo a punto para entronizar el martes al rey Guillermo, hasta ahora príncipe de Orange, después de que su madre, la reina Beatriz, anunciara su abdicación a finales de enero a la edad de 75 años siguiendo una tradición a la que las otras monarquías del viejo continente están poco habituadas.
Amsterdam, epicentro de los fastos en tanto que es el lugar de residencia de la familia real, ha amanecido este lunes bañada de detalles naranjas -el color de la dinastía Orange-Nassau- que lo iluminan todo, mientras los holandeses se reconocen a punto de disfrutar de una fiesta popular de tal dimensión que evidencia cómo la familia real va a agasajar a unos súbditos que la adoran sin apenas fisuras.
Felipe y Letizia, entre los invitados
Esta tarde, se celebrará una cena de gala que la aún reina Beatriz ofrecerá a personalidades de las casas reales de todo el mundo en el Rijksmuseum. Entre los invitados, que comenzará a las cinco de la tarde figuran representantes de monarquías europeas como los príncipes de Asturias, Felipe y Matilde de Bélgica, Federico y Mary de Dinamarca, Guillermo y Stéphanie de Luxemburgo, Haakon y Mette-Marit de Noruega, Carlos y Camilla del Reino Unido y Victoria y Daniel de Suecia.
También estarán presentes los príncipes Naruhito y Masako de Japón, en el que será el primer viaje oficial de la princesa en 11 años.
Al término de la cena, Beatriz ofrecerá a sus huéspedes una visita al recién reabierto Rijksmuseum (el Museo del Reino en holandés), conocido como la Catedral del arte holandés y que alberga obras de grandes maestros como Rembrandt.
La reina abdicará el martes
En la mañana del martes, el 'Día de la Reina', la reina Beatriz abdicará en el Palacio Real en presencia de varios testigos, entre ellos Guillermo-Alejandro y Máxima.
El matrimonio saludará a los holandeses por primera vez como reyes desde el balcón del palacio, acompañados por la que ya será la princesa Beatriz, así como por sus hijas: la próxima princesa de Orange, Catalina-Amalia, y sus hermanas, las princesas Ariane y Alexia.
La investidura de Guillermo-Alejandro se celebrará en la Iglesia Nueva, una ceremonia en la que el nuevo rey no será coronado, según la tradición, y que será seguida por una recepción en el Palacio Real. Por la tarde, los nuevos monarcas escucharán la "canción del rey", antes de realizar la travesía real por las aguas del río Ij, tras la que asistirán con sus invitados a una fiesta final en el Muziekgebouw aan't Ij.
"Locura naranja"
Si, cada año, el Día de la Reina, fiesta nacional, aglutina a 700.000 personas entregadas a la "locura naranja" , este año la capital espera superar con creces esta cifra de visitantes, en su mayoría autóctonos, que se acercarán a aupar a sus nuevos reyes. Toda una muestra de fortaleza para una institución que en otros países, sin embargo, no atraviesa momentos tan dulces.