El primer ministro portugués emplaza al PS a llegar a un acuerdo

El primer ministro de Portugal, el conservador Pedro Passos Coelho, emplazó hoy a los socialistas lusos a realizar un rápido "esfuerzo por el entendimiento" para llegar a un acuerdo entre los principales partidos del país.

Durante su intervención en el debate del Estado de la Nación en el Parlamento, Passos Coelho aseguró estar dispuesto a alcanzar en el plazo más breve posible ese pacto, pedido por el jefe del Estado Aníbal Cavaco Silva a conservadores y socialistas para cumplir el rescate financiero de Portugal.

Pero momentos antes, los socialistas, que anoche rechazaron apoyar o integrar un Gobierno de salvación nacional, pidieron la dimisión del Ejecutivo y solo expresaron su disposición a participar en un "diálogo" con todos los partidos.

En el debate, también los minoritarios partidos marxistas cargaron contra el Ejecutivo y anunciaron otra moción de censura a Passos Coelho, tras rechazar un acuerdo de salvación nacional solo entre conservadores y socialistas y reclamar la convocatoria inmediata de elecciones generales.

A pesar del rechazo socialista, el primer ministro luso, que tiene mayoría absoluta, se mostró dispuesto a lograr "un amplio consenso" con el principal grupo de la oposición en torno a las cuestiones más importantes del país, para cerrar con éxito el programa de ajustes del rescate y regresar al crecimiento económico.

Passos Coelho puso como ejemplo las diferencias existentes también con su socio de Gobierno, los democristianos del CDS-PP, que en su opinión no fueron impedimento para llegar a acuerdos y aprobar las medidas económicas de los dos primeros años de legislatura.

"No es fácil hacer que ese entendimiento sea creíble y duradero. ni siquiera en el Gobierno de coalición fue siempre fácil, pero la trayectoria del Ejecutivo y su actividad demuestra que podemos hacer mucho", defendió.

El líder de la coalición conservadora en el poder se dirigió a los socialistas para insistir en que el objetivo ahora es "traducir las palabras en actos concretos" en el menor plazo de tiempo posible para no permitir que la actual crisis política se eternice.

Pero el secretario general del principal partido de la oposición, Jose Antonio Seguro, fue muy duro con Passos Coelho y proclamó que el Gobierno está en funciones y "sin condiciones" para seguir en el poder.

"La mayoría es una condición pero no basta", reprochó Seguro en alusión a las desavenencias internas entre los dos partidos de la coalición de Gobierno, que juntos superan más de la mitad de los diputados del Parlamento.

Seguro censuró los errores de la política económica de Passos Coelho que consideró "un fracaso", por el agravamiento de la recesión y el desempleo y afirmó que el Ejecutivo "no es competente ni para caer".

Según el dirigente socialista la alianza conservadora deja un legado económico y social dramático y de "degradación".

Passos Coelho, subrayó, debe seguir los pasos del ministro de Finanzas y el de Exteriores, que renunciaron esta semana tras reconocer errores y divisiones internas en el Ejecutivo.

Seguro también reprochó al primer ministro la pérdida de credibilidad dentro y fuera de Portugal que ha causado la crisis de Gobierno desatada la semana pasada con esas renuncias, que llevaron a Cavaco a no aceptar el pacto de los conservadores para mantenerse en el Gobierno y sugerir el Gobierno de salvación nacional.

Pero Passos Coelho defendió el saneamiento de las finanzas lusas y el cumplimiento del programa de rescate, pedido por el anterior Ejecutivo socialista, que se ha logrado en sus dos años de gestión.

Además se mostró optimista sobre la vuelta al crecimiento económico en breve tras los diez trimestres consecutivos de recesión que acumula el país.

"El país no puede parar ahora, sería incomprensible que después de los sacrificios nos quedásemos a medias", aseveró al reclamar al PS la necesidad de "remar hacia el mismo lado".