Un turista alemán que pasaba sus vacaciones en París fue el que redujo al agresor de Chirac
El agresor de Chirac se presentó a las elecciones por el partido de Le Pen
El joven neonazi Maxime Brunerie que disparó contra el presidente francés Chirac en las ceremonias del 14 de julio, ha sido miembro del partido ultradere
Maxime Brunerie, que intentó disparar a Chirac se encuentra bajo vigilancia psiquiátrica
A última hora de la mañana, en función de su estado, el joven continuará bajo observación médica o será puesto bajo custodia policial. El hombre, que confesó que quería matar al presidente de la República y luego suicidarse, fue neutralizado por espectadores del desfile militar del 14 de julio después de hacer un primer disparo con la carabina 22 Long Rifle que, según el Ministerio del Interior, había comprado la semana pasada. La policía lo tenía fichado desde 1997 por su pertenencia a grupúsculos neonazis, cabezas rapadas y «hooligans». Brunerie pertenece al movimiento estudiantil de extrema derecha Grupo Unión Defensa (GUB), creado en 1968. El alcalde de París, el socialista Bertrand Delanoe, dijo hoy que se trata de «un shock muy profundo para el jefe del Estado y el país» y señaló al referirse a los movimientos ultraderechistas que «los discursos de odio» tienen efectos «que pueden ser hiperpeligrosos en los seres frágiles». El Ministro de Interior, Nicolas Sarkozy, ha pedido a la dirección de la Policía Nacional un informe sobre el intento de atentado contra Chirac para sacar las «conclusiones que se imponen». El presidente estaba a unos 150 metros del tirador cuando ocurrieron los hechos cerca del Arco de Triunfo. Chirac estaba de pié en el coche de mando que bajaba por la Avenida de los Campos Elíseos antes del inicio del desfile del 14 de julio. Informado a posteriori del intento de atentado, el jefe de Estado reaccionó con mucha calma, limitándose a decir «!ah!,¿sí?», contó anoche el ministro de Interior. Su colega de Agricultura, Hervé Gaymard, calificó hoy de «extraordinaria» la reacción de Chirac después del intento de atentado. Un turista alsaciano, Jacques Weber, que estaba entre el público congregado para el desfile, fue el primero que intervino para desviar el disparo. «Vi a la izquierda a un hombre que apuntaba hacia el cortejo. Agarré la carabina y la dirigí hacia arriba. Oí un chasquido. Pensé: «está disparando», e intenté reducir» al hombre, explicó Weber ayer.