Hamid Karzai conmemora el primer aniversario de la muerte de Masud

Rodeado por una impresionante escolta de soldados norteamericanos de elite, Karzái llegó a un hotel de Kabul para presidir un seminario dedicado a la memoria de Masud, el «León del Panshir». El dirigente afgano admitió que sin el legado del jefe militar de la coalición antitalibán hubiera sido imposible derribar al régimen integrista. Karzái repitió las palabras pronunciadas el viernes durante una rueda de prensa al asegurar que su país «no está cayendo en el caos». El presidente afgano manifestó también que los atentados del jueves en Kabul y Kandahar, que costaron la vida a una treintena de personas, son sólo «hechos aislados» Temor Pero el temor a que se repitan actos de violencia con motivo del aniversario del 11 de septiembre es más que patente. La ISAF desplegó este sábado en la capital afgana un dispositivo de seguridad sin precedentes. Las medidas de seguridad serán más estrictas en los días críticos, como el aniversario del atentado que costó la vida a Masud, el 9 de septiembre del pasado año, y el de los ataques a las Torres Gemelas y al Pentágono en EEUU dos días después, dijo el oficial turco al mando de la ISAF, el general Hilmi Akin Zorlu. Karzái se trasladó por la tarde al pueblo de Bazarak, en el valle del Panshir, en donde se encuentra la tumba de Masud. «Su misión en la vida fue liberar Afganistán y se convirtió en mártir de esa causa», manifestó el presidente afgano. También se practicaron nuevas detenciones en relación con los atentados del jueves pero las investigaciones no han dado todavía ningún resultado concreto. Las autoridades afganas no dudan que los autores pertenecen a los talibanes y a la organización de Osama Bin Laden. Por otro lado, la nueva oleada de violencia que sacudió el pasado jueves a Afganistán ha puesto de relieve la precaria posición del Gobierno del presidente Hamid Karzai, y la difícil tarea que debe afrontar la comunidad internacional para sacar al país de la guerra y la pobreza.«Este es un buen momento para que actúen los terroristas, para enviar un mensaje a la gente que todavía están ahí», declaró el mayor general turco Hilmi Akin Zorlu, jefe de las Fuerzas Internacionales de Asistencia para la Seguridad (ISAF), al acercarse el primer aniversario del 11 de septiembre en EE. UU. El gobierno afgano, se enfrenta a serios desafíos y despierta temores de que sus enemigos se estén reagrupando.