Desactivado en Roma un tercer libro bomba dirigido a la compañía Iberia

Al igual que en los casos anteriores, el explosivo hallado ayer estaba camuflado entre las tapas de un libro, introducido a su vez en un sobre de los que habitualmente se usan para el correo urgente. El paquete despertó las sospechas de un empleado de la oficina postal del aeropuerto que avisó a la policía que a su vez lo desactivó. El paquete bomba llevaba un escrito propagandístico «similar» al remitido el sábado a la sede de la aerolínea en el aeropuerto de Malpensa, en Milán, que estaba firmado por el grupo hispano-italiano autodenominado «Las Cinco C» (Célula contra el Capitalismo, las Cárceles, los Carceleros y sus Celdas). Los servicios de Información de la Policía Nacional aseguran que estos activistas son los mismos anarquistas que hace ya tres años y medio comenzaron una campaña terrorista contra periodistas, instituciones y diplomáticos en España para pedir la liberación de varios reclusos peligrosos encarcelados en prisiones de diferentes puntos de la península y clasificados en el Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES). El explosivo desactivado en Fiumicino estaba preparado para estallar a la apertura del paquete y se encontraba camuflado en el libro ''La vida cotidiana de los primeros cristianos''. También en la RAI Un paquete sospechoso se incendió ayer dentro de una saca de correspondencia en una de las sedes en Roma de la televisión pública RAI, sin causar daños personales ni materiales. Según fuentes de la RAI, un empleado vio como de improviso salía humo del interior de una saca y, al abrirla posteriormente, se encontró un sobre quemado que podría contener un libro. Los hechos ocurrieron durante el reparto del correo en la sede de la televisión pública italiana situada en Viale Mazzini de Roma, al golpear contra el suelo una de las sacas que transportaban los empleados de este servicio. A raíz del impacto, salió de la saca una gran humareda negra, que alarmó a los trabajadores, que avisaron a la Policía. Artificieros y agentes de la Dirección de Investigaciones y Operaciones Especiales (DIGOS) abrieron la saca y encontraron un sobre quemado con indicios de que podía contener un libro. La Policía italiana, con el apoyo de agentes españoles, investiga la autoría de estos envíos, y del recibido en «El País». La similitud de las bombas, de su expedición y los remites, todos con fecha 9 de diciembre desde la sede milanesa de Iberia en Via Albricci, dirige las investigaciones desde el principio hacia un mismo objetivo.