El líder de un poderoso cártel, objetivo de los asesinos de diez personas

El fuego cruzado entre cárteles de droga mexicanos convirtió un rally, que tuvo lugar en el Estado de Baja California, en el escenario de una masacre. Diez personas murieron y nueve resultaron heridas después de que varios hombres armados dispararan el sábado contra los pilotos y los espectadores del evento que cumplía su quinta edición. La camioneta en la que llegaron los tiradores fue abandonada en el lugar y fue hallada con perforaciones de balas y rastros de sangre en el interior, lo que indicó a las autoridades que el ataque había tenido una respuesta.

Los conductores de los vehículos tipo ‘razer’ habían estacionado a un costado de una carretera desértica cuando fueron sorprendidos por el tiroteo. Los cuerpos sin vida reposaban en el suelo, mientras los heridos intentaban protegerse de los disparos bajo las corazas de sus autos. Los tiradores no estaban dispuestos a dejarlos escapar y también disparaban contra los que intentaban huir de la escena.

Alonso Arámbula Piña, alias El Trébol, de 35 años, relacionado con el Cártel Arellano Félix (CAF), fue una de las víctimas. Aunque las autoridades adelantan una investigación de los móviles del ataque, al parecer asesinar al líder criminal fue el objetivo de la agresión. El Gobierno estatal señaló que el intercambio de disparos fue protagonizado por dos cabecillas de grupos delictivos antagónicos, al parecer, del CAF y Cártel de Sinaloa (CDS).

El cuerpo de Arámbula quedó tendido sobre un ‘razer’ junto al cadáver de su pareja, identificada como Mariana Soto, y el de alias Scarface, presunto miembro de las CAF. Según la Fiscalía, el jefe criminal presumía su vehículo todoterreno en sus redes sociales y mostraba sus frecuentes viajes a Sinaloa. Entre los muertos también se encontró a José Orozco, quien era funcionario de la delegación de San Antonio de Las Minas, una localidad ubicada a unos 80 kilómetros del lugar de los hechos.