Estados Unidos pide a la Otan que se implique en la estabilización de Irak

El secretario norteamericano de Estado, Colin Powell, pidió abiertamente ayer al Consejo Atlántico una implicación de la Otan en la estabilización de Irak. Dirigiéndose a los 26 ministros de Exteriores de la Alianza -los 19 titulares y los siete que se adherirán en mayo, una vez concluido el proceso de ratificación de sus respectivos protocolos de adhesión- Powell planteó al Consejo la posibilidad de «hacer más» en Irak y planteó incluso que la Otan tome el mando del sector que está bajo mando polaco. El consejo no tomó ninguna decisión y el asunto quedó aparcado hasta la cumbre que la Alianza celebrará, el próximo mes de junio, en Estambul. La cumbre aliada se celebrará cuando la coalición internacional que detenta el poder en Irak ceda la soberanía a un Gobierno provisional en fase de preparación, según el calendario en vigor. La entrada de la Otan en Irak fue tratada por el Consejo como una idea para el debate, no como un objetivo a dilucidar, y no suscitó posiciones contrarias, como precisaron Powell y el secretario general aliado, George Robertson. No obstante, el ministro belga de Exteriores, Louis Michell, declaró al final de la reunión que ni él, ni las delegaciones francesa y alemana -las que forzaron la crisis aliada del pasado febrero, con su negativa a auxiliar a Turquía- habían intervenido, dando a entender que su silencio no equivalía a una aceptación de la iniciativa. Aunque 18 de los 26 países que ayer se sentaban en el Consejo Atlántico tienen fuerzas desplegadas en Irak, según un recuento de urgencia de Powell, la Alianza Atlántica, en tanto que tal, no desempeña más papel en esta crisis que el de apoyo logístico para Polonia, país sobre el que recae la responsabilidad del mando de la división internacional a la que se encuentran adscritas las unidades españolas. Aunque la reunión del consejo transcurrió sin tensiones, de acuerdo con diversas referencias, lo cierto es que Estados Unidos utilizó elementos de presión para respaldar sus demandas. Powell hizo referencia a los planes norteamericanos de modificar el despliegue de sus tropas en el continente europeo, una posibilidad que inquieta profundamente a Alemania.