Los radicales desafían a la nueva dirección palestina y boicotean las elecciones

Las organizaciones fundamentalistas Hamás y Yihad Islámica comunicaron ayer al nuevo líder palestino, Abú Mazén, su intención de boicotear las elecciones presidenciales palestinas que se celebrarán el próximo 9 de enero. Los dos grupos lamentaron que no se hayan convocado comicios legislativos, que tampoco se han celebrado desde 1996, pero mientras Hamás dijo que en su momento estudiará si participa en las legislativas, Yihad Islámica afirmó que no tomará parte en ningunas elecciones mientras no exista un Estado palestino independiente. Aunque se cuiden de decirlo en público, la actitud de Hamás y de Yihad satisface a Abú Mazén y su partido, Al Fatá, que así tendrá menos rivales en los comicios. En cualquier caso, las posibilidades de que un candidato de los fundamentalistas accediera a la presidencia de la ANP habrían sido muy remotas, por no decir inexistentes pero el boicot muestra que los dos Abús -Abú Mazén y Abú Alá-carecen de carisma y fuerza para unificar a los palestinos. En su condición de presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Abú Mazen, se reunió ayer en Gaza con representantes de Hamás y de otras facciones radicales con la intención de persuadirlas para que cesen la lucha armada. Pero un portavoz de Yihad Islámica manifestó que su formación no va a abandonar la intifada, aunque se mostró dispuesto a colaborar con las autoridades en el mantenimiento del orden. Igual que Sharón Tanto Hamás como Yihad se han revelado como unas fuerzas moderadas en lo que se refiere a la política interna y no han estado implicadas en ninguno de los graves desórdenes que han afectado a la franja de Gaza en los últimos meses. El presidente de la OLP cree que la mejor estrategia consiste en poner fin a la intifada para negociar con Israel, que es precisamente la misma posición que defiende Sharón. El primer ministro palestino, Ahmed Qorei, alias Abú Alá , pidió a Francia que le envíe un informe médico sobre las causas de la muerte del presidente de la Autoridad Palestina, Yaser Arafat. «Pedimos oficialmente que la dirección palestina sea informada del expediente médico sobre la muerte del presidente (Arafat) y las razones de su muerte», indicó la oficina del primer ministro en un comunicado. Esta petición se produce en medio de persistentes rumores en la opinión pública palestina y el mundo árabe según los cuales Israel habría envenenado a Arafat, fallecido el pasado jueves en París.