El integrismo islámico gana el primer asalto en las elecciones en Arabia Saudí La calle sigue diciendo no

El integrismo islámico se anotó el primer asalto de las elecciones municipales en Arabia Saudi al ganar la mayoría de las concejalías en juego en la convocatoria a las urnas del jueves en Riad. Candidatos próximos al fundamentalismo religioso lograron el triunfo en cuatro de los siete distritos de la capital que se dilucidaban en la cita, que supuso una experiencia inédita en el rico y conservador reino petrolero, cuna del Islam y del líder de Al Qaida, el millonario de origen saudí Osama Bin Laden. Según observadores locales, la victoria de la línea islamista en la convocatoria fue sorprendente debido a las intensas campañas electorales de empresarios ricos frente a un menor despliegue propagandístico por parte de los candidatos que simpatizaban con el fundamentalismo religioso. El Gobierno tiene, sin embargo, la posibilidad de atenuar la influencia integrista en el próximo ayuntamiento capitalino si nombra a personalidades consideradas liberales para los otros siete puestos del consejo municipal de Riad. La consulta -que alcanzó una participación del 60%- constituye la primera de las tres fases de un proceso que servirá para elegir a la mitad de los miembros de los 178 ayuntamientos del país. El resto de los concejales serán nombrados por el gobierno. Las mujeres no pueden votar ni presentarse como candidatas en estas elecciones, que marcan, no obstante, el primer paso en un largo camino hacia la democracia en un país en el que hasta ahora ha imperado una monarquía de corte absolutista. Donald Rumsfeld estuvo ayer extremadamente simpático para convencer a la vieja Europa de que vuelva a ser aliada de Estados Unidos. Lo hizo en Munich. En la misma ciudad en la que decenas de manifestantes dejaron patente en la calle que no creen al secretario de Estado norteamericano y rechazan la política de Bush.