El sol aviva a los pirómanos
Un incendio arrasa más de veinte hectáreas en el Monte de Ferral en un siniestro sofocado por cuadrillas y helicópteros
Un helicóptero ayer en Ferral en dirección al fuego.
Más de veinte hectáreas de monte bajo y pinar ardieron en el mediodía de ayer un incendio registrado en Ferral del Bernesga, en el municipio de San Andrés del Rabanedo. La voracidad de las llamas obligó a los servicios contra incendios de la Junta de Castilla y León a movilizar medios aéreos y terrestres. Dos helicópteros y brigadas de a pie se emplearon a fondo para rebajar la presión de las llamas, que se expandieron con facilidad entre los matorrales azuzadas por el sol de última hora de la mañana.
El fuego se originó en una zona de abundante vegetación lo que facilitó que se expandiera con rapidez. Poco después de las tres y media de la tarde fue extinguido, según han informado fuentes municipales.
El de ayer resultó ser el primer incendio de grandes dimensiones del año, a pesar de la altura del invierno y las precipitaciones recientes y fuertes de los últimos días. Las primeras horas de sol en la previa de la llegada de la primavera sirvieron para borra las huellas de las fuertes lluvias de esta semana y poner el monte como pasto al servicio de los pirómanos. La intervención de los medios aéreos sirvió para detener el avance del fuego que llegó a ser visible a varios kilómetros del lugar debido a la intensidad del humo Además de los dos helicópteros de la Junta de Castilla y León, con base en Rabanal, han participado en la extinción una brigada de tierra así como efectivos de Protección Civil de San Andrés del Rabanedo y la Policía Local.
Así acabó un incendio propio del estío en pleno invierno.