La capital recauda 2,3 millones menos por licencias urbanísticas

La caída de las licencias de obra nueva traslada su incidencia en el sector a la pérdida de ingresos por parte de las arcas municipales. Un descenso del 56,5% desde el año 2008 hasta el recién cerrado ejercicio 2012.

El descenso se traduce en 2,3 millones de euros menos de entradas de capital para la administración municipal. Unos ingresos que en el 2008, aun con una caía considerable de la obra de nueva de 150 a 67 licencias, contabilizaba más de 4 millones de euros para sufragar personal, gasto corriente e inversiones. Una de las partidas que marcan la delicada situación presupuestaria del Ayuntamiento de León, donde los años de bonanza permitieron aplicar estos ingresos para ejecutar obras para la ciudad.

Frente a estos registros, en el último año tan sólo se ingresaron 1.767.843 euros provenientes de la construcción. Una partida que se desglosa entre los dos tributos que regulan estos trabajos. El Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (Icio), que sumó 1.060.893 euros, provenientes del pago que tienen que hacer los propietarios y que se corresponde con un 4% del presupuesto de ejecución material, sin IVA, ni tasas. Un desembolso económico junto al que los promotores tienen que abonar la licencias urbanísticas, que ascendieron a 706.950 euros, de acuerdo a la tasa, calculada como un 0,65 de la factura y que grava la tramitación administrativa del expediente municipal.