Los recortes ponen en peligro a la mitad de los limpiadores de la ULE

Los trabajadores del servicio de limpieza de la Universidad de Leon (ULE) comenzarán mañana una serie de protestas con las que quieren exigir a la institución académica a rectificar en la partida presupuestaria destinada a este fin, que contempla un “recorte brutal” que obliga a realizar modificaciones en las condiciones laborales y salariales en el último pliego aprobado. De hecho, se estima que podría prescindirse de la mitad de la plantilla de este servicio, actualmente compuesto por algo más de un centenar de trabajadores, si no se diera marcha atrás en estas condiciones.

El secretario provincial de USO, Antonio Nicolás, recordó que el contrato ascendía con anterioridad a 2,7 millones de euros, mientras que el último presupuesto de la ULE destina al servicio de limpieza algo menos de dos millones de euros, un recorte muy significativo que además afecta a un colectivo que cuenta con salarios y condiciones “muy por debajo de la media de la provincia”.

Por eso, el objetivo es instar a la ULE a que revise el precio del contrato, ya que está proponiendo a la empresa adjudicataria “el despido y la bajada de las condiciones de este colectivo y de sus derechos sociales”. Por eso, mañana mismo iniciarán una serie de movilizaciones con una concentración frente al edificio de Gestión Académica de la ULE, en el campus de Vegazana, a partir de las 11 horas, unas protestas que “se irán incrementando” y que podrían desembocar en una huelga.

En la misma línea se expresó el secretario del Sindicato Provincial de Servicios Privados de CCOO, Alberto Flecha, que incidió en la reducción “sistemática” del personal del servicio de limpieza en los últimos años, a lo que hay que sumar el “recorte brutal” recogido en el último pliego de condiciones y que “no cubre ni siquiera la mano de obra”.

Por su parte, el secretario de la Federación de Servicios de UGT, Enrique Reguero, reconoció que los presupuestos de la ULE son “superiores a los de otros años”, a pesar de lo cual la partida destinada a las empresas externas se ha reducido de manera notable. “Es un servicio para trabajar en las mejores condiciones” tanto de profesores como de alumnos, aclaró Reguero, que reclamó a la institución académica que rectifique y que presupueste “más alto” para corregir este conflicto.

De hecho, los responsables sindicales relataron cómo las mejores empresas del sector no han acudido a la convocatoria de este concurso, al entender que las condiciones establecidas no podían mantenerse y no resultaba viable. Una vez adjudicado el servicio a la empresa Linosa, el contencioso en el que se encuentra el contrato ha obligado a la paralización del pliego hasta que se produzca una resolución.