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El municipio logra una depuradora de 1,75 millones que gestionará Somacyl
La infraestructura solucionará el grave problema de vertidos y funcionará en 2016.
La futura depuradora de Onzonilla se ubicará cerca del Bernesga, entre Sotico y Torneros.
Onzonilla ha logrado, tras años de reivindicaciones, que el municipio disponga de una depuradora que evite las cuantiosas multas que impone cada año la CHD por sus vertidos. La infraestructura, presupuestada en 1,75 millones de euros, comenzará a construirse en las próximas semanas, tras haber concluido el pasado viernes el trabajo topográfico, que fija los mejores terrenos en el pequeño pueblo de Sotico.
Además, el Ayuntamiento ya firmó con la Consejería de Fomento el convenio que sienta las bases de la colaboración entre ambas instituciones «para la construcción, explotación y mantenimiento de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar)». Un documento sobre la limpieza de las aguas residuales del municipio que también incluye colectores interceptores en los núcleos de Onzonilla, Vilecha, Torneros, Sotico y la zona industrial de la carretera C-630. Las localidades de Antimio de Abajo, de 53 habitantes, y Viloria de la Jurisdicción, de 138, son las únicas que no engancharán sus aguas sucias a la futura depuradora al situarte en la otra vertiente del municipio.
En cuanto a la financiación, el Consistorio aportará 600.000 euros distribuidos en tres pagos, el primero cuando se firme el replanteo, el segundo al certificarse el 50% de la obra y el tercero, tras la recepción de los trabajos. El resto de la inversión será aportado por la consejería de Fomento y Medio Ambiente a través de Somacyl, que explotará la nueva depuradora durante 25 años prorrogables por periodos sucesivos de 10 años.
Según las previsiones, la infraestructura entrará en funcionamiento en 2016. Paralelamente al inicio de las obras, el Ayuntamiento está tramitando su baja de la mancomunidad León Oeste «porque no puede cumplir los objetivos de depuración que necesitamos», reconocen.
Tres intentos
La Edar es el tercer intento de Onzonilla en los últimos años para solventar sus vertidos. En 2008, se unió a Santovenia de la Valdoncina, Valverde de la Virgen y Vega de Infanzones para exigir una macro depuradora de 32 millones de euros que permitiera a los 22 pueblos limpiar sus aguas contaminantes. También proponían que tras la depuración se devolvieran al río Esla, en lugar de al Bernesga, más sobrecargado. El elevado coste de la infraestructura, el fallecimiento de uno de sus máximos impulsores, el alcalde de Onzonilla Victorino González, y la crisis económica dejaron aparcado el proyecto. El Consistorio intentó después encontrar un sistema de depuración de sus aguas residuales ligado al complejo logístico que se planteaba en Torneros, hoy también paralizado por falta de financiación. El siguiente paso fue reclamar una depuradora propia, la que Fomento ha concedido.