Fallos informáticos y 200 averías lastran el servicio del préstamo de bicicletas

Numerosos fallos informáticos y las 200 averías registradas el pasado año en el sistema de préstamo de bicicletas del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo están lastrando el buen funcionamiento de este servicio, según señala el equipo de gobierno. La Concejalía de Medio Ambiente ha detectado en las revisiones de los ocho puntos de préstamo roturas en los frenos, el portabultos y las ruedas. También han constatado desperfectos intencionados o robos y fallos del sistema operativo en la pantalla táctil, los ordenadores o el lector de tarjetas que provocaron que los puntos quedaran, en muchas ocasiones, fuera de servicio.

Esos problemas «impiden la correcta operatividad del servicio, como se puede comprobar en los informes mensuales emitidos por la Concejalía», señala la responsable del área, Noelia Álvarez, quien acusa al PSOE de añadir trabas por dejar sin pagar 100.000 euros a la empresa de mantenimiento, lo que ha obligado al Ayuntamiento a acudir a otra compañía para que supervise todos los puntos de préstamo. Es más, la concejala señala que la adjudicataria de Burgos que gestionaba las bicicletas «nunca cobró la subvención que percibió el Consistorio de San Andrés para poner en marcha este servicio cuándo gobernaba el PSOE». Un dinero que desconoce para qué se utilizó, pero que asegura provocó la deuda que la compañía cobró gracias al préstamo ICO. «Una vez más la señora Gancedo se gastó un dinero destinado a las bicicletas en algo que sólo ella sabe y este equipo de gobierno tuvo que pagar a la empresa que, lógicamente, no ha seguido prestando el servicio», remarca.

Además de ese desembolso, la conexión a Internet de los lugares de préstamo genera un gasto mensual de 600 euros. Álvarez remarca que la falta de mantenimiento informático de estos equipos y la inexistencia de técnicos cualificados para hacerse cargo del trabajo, hizo que el Ayuntamiento contratara esos servicios a otra empresa para poner a punto los dispositivos. Según el informe emitido por la nueva firma, los monitores de los puestos de Villabalter y la casa de cultura de San Andrés poseen «importantes deficiencias en las pantallas táctiles, lo que hace que se apaguen, al igual que el ordenador que gestiona dicho puesto».

Para que el sistema de préstamo de bicicletas volviera a funcionar con normalidad sería imprescindible, según la concejala, cambiar los transformadores de las pantallas táctiles, reparar el ordenador de la casa de cultura de San Andrés y reponer los ordenadores que faltan, lo que supondría un importante coste para las arcas municipales.