Las posibles ofertas esperan a las condiciones de liquidación del grupo

Las posibles ofertas empresariales que se lleguen para hacerse con todo o parte del negocio de editorial Everest esperarán en todo caso a que el Juzgado de lo Mercantil establezca las condiciones de liquidación de la empresa, dentro del proceso concursal que se tramita. En el plazo aproximado de un mes el juzgado podrá recibir las ofertas de compra bien por el grupo, cualquiera de sus tres divisiones (Evergráficas, Editorial y Edición o Distribución), o las partes en las que se divide su actividad.

De no recibir ninguna oferta en esta fase, el juez determinará una nueva vía en el proceso de liquidación, que pasaría también por la venta de los bienes y la maquinaria del grupo.

Una parte de esta maquinaria, así como la cartera de licencias de las obras publicadas por Everest, fueron defendidos desde el primer momento como principales activos del grupo. Sin embargo ahora la situación se torna cada vez más compleja, e incluso en caso de que surjan compradores esperarán a la fase de liquidación para acceder a los activos al mejor precio posible.

De momento la representación laboral espera las noticias de los administradores concursales, aunque sigue confiando en que la familia propietaria del grupo actúe en esta última fase del proceso concursal con el objetivo de buscar una solución que evite in extremis la desaparición de la compañía.

Lo más urgente para los trabajadores es que se resuelva el expediente de extinción de los empleos, lo que esperan para estos días.