celeridad en las obras
El Hospital activa la reforma de las cañerías deterioradas por los ácidos
Pese a la reacción de la Gerencia, Satse eleva quejas de hace un año a la Consejería de Sanidad.
Operarios de mantenimiento, ayer en la obra de la fachada. DL
m. romero | león
El gerente del Hospital de León, Juan Luis Burón, ordenó ayer la inmediata revisión y sustitución de las canalizaciones del departamento de Anatomía Patológica del centro asistencial, cuyo deterioro denunciado desde hace meses por los trabajadores provocaba la fuga de olores desagradables procedentes de los desechos altamente tóxicos utilizados en esta planta. Ayer, este periódico difundía los fallos denunciados en el complejo sanitario de León por parte del procurador autonómico de Ciudadanos por León, Manuel Mitadiel, quien ha dado traslado de la situación a la Comisión de Sanidad de las Cortes de Castilla y León.
La reacción de la dirección del Hospital no se ha hecho esperar, en primer lugar, «para tranquilizar a personal y usuarios», declaró Burón. Y después para dar una solución definitiva al problema de salubridad que ha sido motivo de quejas desde hace meses, tiempo en el que se han realizado reformas inservibles. Para zanjar el problema, las tuberías serán sustituidas por otras de materiales más resistentes a los ácidos que canalizan y se dirigirán por el exterior del edificio.
«Ha sido el propio personal de enfermería el que tras sufrir síntomas como urticarias, nauseas, vómitos, picor o mareos han identificado el origen de este olor como una posible fuga en el vertido de productos químicos peligrosos, sin que en ningún momento se pusiera a su disposición medidas preventivas para solucionar el problema hasta la evacuación de las consultas de dermatología el pasado viernes 13 de mayo», denunció ayer en un comunicado el sindicato Satse.
«Después de un año y medio —añade— se ha demostrado que el problema, según ha reconocido el propio servicio de mantenimiento, es el deterioro de las tuberías que evacúan estos vertidos a un contenedor estanco en el subsuelo», cuyo paso coincide con las consultas anteriormente mencionadas. «Lo más sorprendente es que ya se detectó el problema en el año 2013 y las tuberías de vertido fueron sustituidas por otras de PVC».
Según recordaron ayer fuentes del sindicato, el problema se ha conocido «cuando los propios trabajadores llevan meses expuestos a un riesgo derivado de la exposición mantenida a agentes químicos peligrosos sin saber el alcance del daño producido».
Por esta razón, reclaman al gerente que se adopten las medidas oportunas que «subsanen definitivamente el origen de este problema, que se pongan en funcionamiento los sistemas de prevención necesarios y que se valore a los trabajadores afectados de las consecuencias ocasionadas por esta gravísima situación.
El sindicato ha elevado la queja tanto al gerente de las diferentes áreas afectadas como al director General de Salud de la Consejería de Sanidad de Castilla y León.