«El reto es innovar sin perder la identidad y profesionalizarse»

«La provincia de León tiene todos los ingredientes para convertirse en uno de los grandes destinos, conserva el encanto de la España real, y es muy importante no perder la identidad. Debería explotar el orgullo de ser una de las grandes cunas de la cultura. Tiene que creerse, como todo el país, su propia historia. Hay destinos que con mucho menos patrimonio hacen un marketing que les convierte en referencias importantes»..

Gustavo Egusquiza, periodista especializado en turismo y gastronomía a nivel internacional, ha analizado los potenciales y debilidades del sector turístico en la provincia.

«León está haciendo un esfuerzo importante por desestacionalizar el turismo, ofertar productos en temporada baja. Debe potenciarlo en el exterior, y apostar por un turismo cultural, de calidad y poder adquisitivo alto». Pero no sólo eso. «A partir de ahora es fundamental crear emoción, conseguir que la gente vuelva. Y convertir realmente el turismo en un motor económico para la provincia. Para ello es necesario alcanzar al menos las dos noches de estancia, sólo a partir de entonces el comercio puede beneficiarse del negocio del turismo».

Para el experto, que lamenta que «el patrimonio de León, cultural y natural, siga siendo en realidad un gran desconocido», uno de los reclamos turísticos de futuro es la creación de citas culturales que «se conviertan en un referente. Son un marketing gratuito y te colocan en el mapa, y hacen además que los turistas regresen». De hecho, «elegir bien el público al que va dirigida cada oferta y escoger qué propuestas turísticas se promocionan en qué lugares es fundamental».

Apunta además otras tendencias en crecimiento en el mercado turístico internacional, de las que puede beneficiarse el sector en la provincia a través de un correcto posicionamiento. Por ejemplo «los camping de lujo, que tienen gran demanda y tradición en Europa, y donde los viajeros se pasan de media más de 15 días». El turismo de salud es otro de los grandes potenciales desaprovechado en la provincia: «Cada vez hay más demanda, pero no se ha abordado».

Los viajes en solitario son otra tendencia creciente en Europa, hay agencias especializadas en ellos; así como los viajes de aventura, «que decididamente apuestan por experiencias diferentes que rompen la rutina».

Añade que el Parador es «maravilloso, pero está obsoleto», y anima a fijarse en la renovación que han vivido sus equivalentes en Portugal, las pousadas. «También hay que modernizar la gastronomía, sin perder su identidad y sus productos, adaptarse a las tendencias con alternativas más saludables, que sean atractivas por ejemplo para los millenials».

En el caso del turismo rural, «uno de los pilares del sector», es fundamental ofrecer actividades. «Cada vez se reclaman más experiencias diferentes, y que todos los servicios estén organizados al llegar al destino. Se organizan además a través de las nuevas tecnologías».

En todos los casos, Gustavo Egusquiza llama la atención sobre la exigencia de profesionalizar el sector. «La cualificación de los trabajadores es urgente e imprescindible, la clave del éxito es la atención al cliente. Eso exige un esfuerzo en innovación y es la gran asignatura pendiente del sector. Hay que ponerse en la piel del cliente. Ahorra para realizar estos viajes, quiere experiencias y no tener problemas o disgustos».