Diario de León

LEÓN ■ ´BUEN TIEMPO QUE ES MAL TIEMPO

Un potente anticiclón bloquea la llegada de lluvia y nieve en León toda la semana

La estación Valle de Laciana-Leitaiegos ha tenido que cerrar debido a que la lluvia ha acabado con toda la nieve acumulada y San Isidro tenía menos de 2 km esquiables aunque ha nevado un poco a lo largo de hoy.

Paisaje en Valle de Laciana-Leitariegos.

Paisaje en Valle de Laciana-Leitariegos.

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La nieve aún caerá mañana en la provincia de León  antes de la entrada del anticiclón de Las Azores que, a lo largo de la semana próxima, impedirá la llegada de la lluvia a toda la península. Durante el fin de semana se producirá una disminución gradual de las precipitaciones y de la nubosidad. La nieve dejará mañana una acumulación entre 5 y 19 centímetros en 24 horas en zonas de montaña. La cota de nieve se situará a 800/1.100 metros.Eso será todo.

Una mala noticia para las estaciones de esquí de la provincia. Valle de Laciana-Leitaiegos ha tenido que cerrar debido a que la lluvia ha acabado con toda la nieve acumulada y San Isidro tenía menos de 2 km esquiables aunque ha nevado un poco a lo largo de hoy.

Un potente anticiclón de las Azores impedirá la llegada de la lluvia a toda la península durante toda la semana. Las altas presiones volverán a bloquear durante días "la llegada de cualquier atisbo de borrasca" con las consiguientes repercusiones en la contaminación y en la ausencia de lluvias, ha adelantado Delia Gutiérrez, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorlogía (Aemet).

De momento, "no existen indicios" de que esta situación revierta debido a que este anticiclón invernal de las Azores suele ser "persistente y duradero", ha lamentado Gutiérrez para agregar que, en la actual situación de escasez de lluvias y sequía que domina el país, "el tiempo bueno, no es nada bueno".

El sábado las temperaturas descenderán en toda España y la cota de nieve se situará unos 700/900 metros en Pirineos y 800/1.100 metros en el resto de la mitad norte bajando a lo largo del día.

A partir de la próxima semana, la situación de bloqueo impedirá, con toda probabilidad, el desarrollo de nubosidad, dejando los cielos despejados y propiciando días secos, soleados y fríos en los que las heladas nocturnas y la formación de nieblas matinales, especialmente en la meseta, adquirirán gran protagonismo.

Para Gutiérrez, la casi total ausencia de precipitaciones para la próxima semana ahondará más el "desastre" en el déficit de lluvias que arrastra España, aunque los días pasados se registraron lluvias por toda la geografía española que dejaros 143 litros por metro cuadrado en Santiago de Compostela, 130 litros en Vigo, 112 litros en Gijón y 100 litros en Avilés.

Según datos de la Agencia de Meteorología, el valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas desde el pasado 1 de octubre hasta mediados de diciembre se cifra en 104 litros por metros cuadrado, lo que representa un 45 por ciento menos que el valor normal correspondiente a dicho periodo que es de 188 litros. De esta manera, salvo en Cantabria y en el País Vasco, en el norte de Mallorca y en puntos aislados de Asturias, en el interior de Granada y en el norte de Málaga, las cantidades acumuladas se encuentran por debajo de su valor normal en toda la península y en los archipiélagos.

En la mayor parte del territorio nacional las precipitaciones están por debajo del 75 por ciento de su valor normal y no llegan a alcanzar el 25 por ciento del valor normal en el levante peninsular y mitad sur de Aragón, en el pirineo gerundense, al oeste de Guadalajara, en el sur de las islas de Tenerife y Gran Canaria y en la isla de La Gomera.

Poco en los embalses

Los embalses de la Cuenca del Duero han ganado 63 hectómetros cúbicos con las lluvias y nieve de los últimos diez días, que han aliviado la situación de los pantanos leoneses y el abastecimiento de agua a Astorga (León), y de manera muy tibia la de los de Palencia.

La comisión permanente de la sequía de la cuenca del Duero se ha reunido hoy en la sede de la Confederación Hidrográfica en Valladolid para analizar ese aumento del volumen de agua. Ese incremento ha mejorado ligeramente la situación de los embalses de la cuenca del Duero gestionados por la Confederación, aunque todavía se encuentran muy alejados de los valores medios propios de la primera quincena de diciembre, según ha referido el organismo de cuenca a través de un comunicado.

En la reunión se ha destacado la mejora de los embalses de la provincia de León, concretamente de los sistemas Órbigo y Esla, así como el aumento del caudal del río Tuerto que ha permitido acumular medio hectómetro cúbico más en la presa de Villameca, de la que se abastece Astorga, mejorando las reservas para atender las demandas de consumo humano en los próximos meses.

Los embalses leoneses han ganado 48 hectómetros cúbicos en los últimos díez días, con el pantano de Barrios de Luna, que ha llegado a estar a menos del cinco por ciento y que ha dejado imágenes inéditas, que ha duplicado su volumen almacenado, al pasar de 13,8 a 27 hectómetros cúbicos; mientras que los de Riaño y Porma han incrementado sus reservas en 24,5 y 9,4 hectómetros cúbicos, respectivamente.

En cuanto a los sistemas de Palencia, han experimentado un aumento de reservas pero de manera más tibia; y en el Carrión, los embalses de Compuerto y Camporredondo suman 6,3 hectómetros cúbicos más hasta alcanzar 23,1, en tanto que los embalses de Requejada, Cervera y Aguilar, en el Pisuerga, registran una subida de 5,8 hectómetros cúbicos -contienen casi una treintena entre los tres-, de manera que la situación de ambas zonas sigue siendo delicada.

También se han observado mejoras muy discretas en todos los embalses del Estado en la cuenca del Duero desde principios de mes, especialmente el de la Cuerda del Pozo (Soria), que ha ganado casi dos hectómetros cúbicos al crecer el caudal de entrada del Duero hasta los 4,1 metros cúbicos por segundo.

En el extremo opuesto hay que citar Las Cogotas (Ávila), Úzquiza (Burgos) e Irueña (Salamanca), que experimentan pequeños descensos por haber llovido menos en esas zonas, aun cuando se aprecia una clara mejora de los caudales de entrada en las últimas semanas.

A pesar de este alivio, continúa la situación de déficit hídrico en la cuenca del Duero, si bien una pluviometría normal en los próximos cuatro meses -basada en los registros de entradas medias de las últimas décadas que no se están produciendo- dejaría los embalses en un estado aceptable de cara a la atención de las demandas a lo largo de 2018.

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