La Junta rememora el revés del plan anterior con las lanzaderas al AVE

El proyecto que promueve la iniciativa privada en Asturias para acercar el acceso al AVE a través de un sistema de autocares lanzadera hasta la estación de León, lleva a recuperar la experiencia vivida con un sistema similar que se desplegó en el año 2015. También, con Ponferrada como origen y destino de la alternativa intermodal, precedente del proyecto impulsado desde el Principado, que propone un ramal para los usuarios de la capital berciana. Fuentes de la consejería de Fomento del gobierno autonómico de Castilla y León recuerdan el resultado desalentador que arrojó aquel proceso.

El día 14 de diciembre de 2015 entraron en servicio las lanzaderas, para dar conexión intermodal directa a Ponferrada con las nuevas líneas de AVE que poco antes había estrenado destino a León; en seis meses de servicio se contabilizaron 141 usuarios, en las suma de todas los trayectos completados para dar acceso al tren AVE. Fuentes de la administración contabilizan una media de 0,3 viajeros por expedición completa, con un coste asumido por la Junta de 18.000 euros mensuales; 120.000 euros en el total de la prestación del servicio que llegó a suprimirse por la nula relación de eficiencia con el gasto público que suponía.

Los autocares lanzadera se desplegaron de lunes a viernes para hacer posible la conexión del área urbana de Ponferrada con el AVE en la estación leonesa las 12,30 horas y 17,25 horas un servicio Ponferrada–León-Madrid y su regreso a las 22,40 horas. Y las paradas se configuraron en la propia estación de trenes, con señalización al efecto, para mayor comodidad e intermodalidad. El matiz con respecto a ese proyecto que plantea la iniciativa privada apadrinada desde Asturias es que el acceso se ofrece con un desplazamiento en un horario competitivo, a primera hora de la mañana, para facilitar el desempeño laboral o profesional adecuado en la capital de España, y desde un AVE que realiza el trayecto directo León-Madrid, con un tiempo de duración más atractivo para el usuario. En el caso de Gijón se calcula que en 3 horas y 40 minutos; para Ponferrada, en 3 horas y 20 minutos. Con aquel sistema de lanzaderas que sufragó la Junta, los viajeros también podían ir a Madrid y volver en el mismo día llegando antes de las doce de la noche a sus domicilios a Ponferrada, según aporta la administración sobre la experiencia intermodal.

No hay salvedad en el procedimiento de despachos para los viajeros; para mayor comodidad, el billete se podría adquirir en la página de Renfe y además estaba bonificado respecto al importe ordinario del Ponferrada-León. El autocar tenía fijado un trayecto directo, con parada únicamente en Astorga para recoger también los usuarios interesados de esa ciudad y comarca. El proyecto se maneja para poner en marcha desde Asturias contempla desplazamientos directos desde cuatro ciudades del Principado a la estación de León, más una quinta ruta, desde la capital berciana a la estación de Adif.

Desde la Junta se recuerda que aquel servicio alternativo entró en funcionamiento con carácter experimental, y venía condicionado a efectuar, una vez transcurrido un tiempo prudencial, una valoración del servicio que sirviese para decidir sobre si procedía su consolidación como nueva línea de comunicación.