El asesino de Cortizo cambia Algeciras por Herrera de la Mancha

m.a.z. | león

Sergio Polo Escobes, condenado a 110 años de prisión como autor del atentado terrorista de ETA que el 22 de diciembre de 1995 acabó con la vida del Comandante Cortizo en la calle Ramón y Caja de León, ha sido trasladado ya de la prisión de Algeciras a la de Herrera de la Mancha, en el marco de las políticas de acercamientos practicadas por el Ministerio de Interior.

Bajo la misma filosofía, Olga Comes Arrambillet, única mujer etarra que quedaba en el Centro Penitenciario Provincial de Villahierro, se irá a Asturias para cumplir la cuarta parte de la condena que le falta en el Centro Penitenciario de Villabona.

Comes había sido condenada a 11 años de cárcel por intentar secuestrar al edil del Partido Socialista de Euskadi (PSE) de Eibar Benjamín Atutxa, para lo que preparó ampollas tranquilizantes y excavó un zulo en compañía de un segundo condenado, también perteneciente a ETA.

Comes huyó a Francia en 2007 desde Pamplona y a finales de ese mismo año volvió a España para integrarse en el comando, al que la cúpula de la organización hizo llegar información sobre el concejal, que acudía a su trabajo en un centro de enseñanza sin escoltas, para que le secuestraran y le ejecutaran luego. Fue detenida tras una investigación exhaustiva.