Diario de León

LA GUARDIA CIVIL SIGUE AVANZANDO EN LA INVESTIGACIÓN

Colea el caso de la burundanga

La Guardia Civil cuenta ya con las imágenes de una oficina bancaria en las que se aprecia cómo la sospechosa entra con una víctima que se sostiene en pie a duras penas y le firma un cheque para que lo cobre.

La detenida permanece recluida en el Centro Penitenciario de Villahierro. MARCIANO PÉREZ

La detenida permanece recluida en el Centro Penitenciario de Villahierro. MARCIANO PÉREZ

León

Creado:

Actualizado:

El equipo de la Guardia Civil que investiga la supuesta utilización de burundanga por parte de una joven leonesa que permanece en prisión acusada de valerse de esta sustancia para conseguir beneficios económicos en su entorno más cercano dispone ya de imágenes de una entidad bancaria en la que, según fuentes de la investigación, se aprecia como la sospechosa accede al lugar acompañada de una de las víctimas (la que terminó ingresada en el Complejo Asistencial Universitario de León el fin de semana de Reyes).

Se trata de una oficina bancaria leonesa en la que se comprueba que la investigada llega con una joven que a duras penas se puede mover y ambas acceden al interior de la sucursal. Una vez allí, se realiza la operación de cobro de un cheque que se extrae de las pertenencias de la víctima y posteriormente ambas abandonan el lugar. La suma de dinero recogida en esta operación fue de cierta importancia.

CÍRCULO PRÓXIMO

A la investigación le consta que episodios de estas características se han repetido en su círculo más próximo aunque en algunos casos, por la cercanía de estas personas se ha decidido no presentar denuncia.

La joven continúa recluida en el Centro Penitenciario Provincial de Villahierro, donde se adapta a las condiciones de su nueva vida a la espera de que la jueza resuelva la petición de libertad provisional formulada por su representación letrada, que se opone al auto de encarcelamiento dictado por la magistrada del órgano instructor de la causa.

La escopolamina, burundanga o «droga del violador» es una droga muy tóxica: una sobredosis puede causar depresión, taquicardia, convulsiones, delirios, parálisis, insuficiencia respiratoria y la muerte. Se trata de una droga de sumisión que anula la voluntad de las víctimas —que pueden desconocer lo que están tomando—, que las convierte poco menos que en maniquíes humanos o zombies sin voluntad. El afectado o afectada, pierde la memoria de ese periodo de tiempo tras desaparecer los efectos que pueden durar unas dos horas. Es la décima droga más mortal que existe.

BEBIDAS O CIGARRILLOS

Los usos más frecuentes son diluirla en bebidas o meterlo en cigarrillos. También es frecuente la inhalación (impregnar un papel con polvos y simplemente acercarlo ligeramente a la nariz o cara de la persona ya sirve). En ocasiones basta con tocar un pañuelo impregnado o mirar un mapa en el que hay polvos mientras se pide datos (se inhalan los polvos al acercarse).

La intoxicación aguda (sobredosis) implica: piel seca, hipertermia, ausencia de saliva y sudor, midriasis, alteración cardíaca, visión borrosa, retención urinaria, desorientación, fabulaciones, delirium, alucinaciones y ligera euforia e incluso el coma. En dosis muy altas puede causar depresión severa, arritmia, insuficiencia respiratoria y colapso.

Las pruebas biológicas remitidas a un centro médico de Barcelona confirmaron la existencia de restos de burundanga en la anatomía de la principal víctima de esta causa, la que fue ingresada en la víspera de la Noche de Reyes en el Complejo Asistencial Universitario de León. La joven fue dada de alta pocos días después y continúa recuperándose de las secuelas que presentaba a resultas de los hechos ocurridos.

tracking