REIVINDICACIÓN DEL SECTOR
Los hosteleros exigen un cambio en la recogida de vidrio del Barrio Húmedo
Méndez critica que el sistema puerta a puerta entorpece a las terrazas los fines de semana
El camión de recogida, este pasado fin de semana, con las terrazas de la plaza llenas. DL
El sistema «no funciona», como se quejan los hosteleros. El plan para la recogida de vidrio puerta a puerta en el Barrio Húmedo choca por el momento con el sector, como alerta el presidente de la Asociación Provincial de Hostelería, Martín Méndez, quien se queja de que « no puede ser que sólo haya un camión los fines de semana y que, por ejemplo, a las 15.00 horas, con las terrazas llenas, entre en mitad de la plaza de San Martín y se ponga a molestar a la clientela». «Hay que buscar una solución consensuada, pero lo que está claro es que de esta manera nos supone un perjuicio», sentencia, a la espera de reunirse hoy con los responsables del Ayuntamiento y de Ecovidrio.
Méndez insiste en que la recogida puerta a puerta, que empezó a funcionar después de Navidad, «es una idea que suena genial», pero a la que hace falta «dar una vuelta». El portavoz de los hosteleros recuerda que una persona de Ecovidrio, el organismo sin ánimo de lucro que firmó el convenio con el Ayuntamiento, empezó por hacer «entrevistas con los hosteleros para recabar información sobre los horarios», pero se ha demostrado que «no han sido capaces de poner de acuerdo a todos».
«Nosotros entendemos que no se puede sacar por las noches porque se molesta a la gente, ni tampoco que sea a las 09.00 horas porque muchos cierran tarde, pero lo que no puede ser es que sea cuando más clientela hay en los locales», describe el representante del sector, quien abunda en que «si mandan un camión a las 12.00 horas y tiene que atender a los 230 locales es lógico que llegue a muchos sitios cuando más gente hay».
El camión pasa «los lunes, miércoles, viernes y sábados» y, aunque «es voluntario», de hecho «es casi obligatorio porque han ido quitando los contenedores» hasta dejarlo «sólo en Caño Badillo, Don Gutierre y la plaza del Conde».
«A lo mejor se puede establecer unos locales en los que se centralice ese vidrio y que luego lo recojan ahí o poner más contenedores», señala Méndez, quien señala que «no puede ser que se restrinja el acceso de vehículos, se quiere tener un casco histórico precioso y luego pasen cosas de estas».