academia básica del aire
Defensa mantiene el control militar de la base del Aire sobre el aeropuerto de Asturias
Las pistas del Principado, a pesar de ser civiles, dependen directamente de León para casos que afectan a la seguridad nacional.
El aeródromo de León es de carácter militar, aunque abierto a operaciones civiles, de hecho, los controladores aéreos pertenecen al Ejército. JESÚS F. SALVADORES
El coronel director de la Academia Básica del Aire, José Antonio Gutiérrez Sevilla, es también el responsable militar del Aeropuerto de Asturias, a pesar de que las pistas de Ranón son meramente civiles. Defensa organiza a través de las Comandancias Militares Aéreas de Aeropuerto el control de todas pistas a nivel nacional, ya sean civiles o militares, para, en caso de emergencia, asumir el control. El Gobierno acaba de reorganizar esta estructura a nivel nacional tras la apertura al tráfico del Aeropuerto de la Región de Murcia, lo que provocó que el aeródromo de Córdoba, que hasta ahora dependía de Sevilla, pasase a hacerlo de Granada. A su vez, en los cambios, se rafiticó el control militar de la Academia Básica del Aire sobre las pistas civiles asturianas.
El aeropuerto de Asturias, aunque es únicamente civil, por cuestiones de interés de la defensa nacional o de la aviación militar depende orgánicamente de la Comandancia Militar Aérea de Aeropuertos de León, es decir, del máximo rango del Ejército del Aire en la provincia, el coronel de la Academia Básica de La Virgen del Camino. De este modo, Gutiérrez Sevilla mantiene una estrecha vinculación con el Principado —todos los coroneles directores deben presentarse oficialmente allí cuando toman posesión del cargo y están invitados a los premios Princesa de Asturias— o cada vez que acude el rey a la autonomía vecinas en avión deben desplazarse hasta el aeropuerto de Ranón para recibirle oficialmente.
Las comandancias militares aéreas se organizaron en España en 1978, cuando se hizo la primera distribución de los aeropuertos civiles y militares, que ha ido cambiando con los cierres y las aperturas de las instalaciones. Un caso claro de esta dependencia militar de Asturias respecto a León quedó patente en 2010, cuando la huelga de los controladores aéreos civiles provocó la declaración del estado de alarma a nivel nacional. Entonces, los controladores militares leoneses fueron trasladados a Asturias para asumir las funciones que desarrollaban los civiles que se habían puesto en huelga y mantener la actividad ordinaria del aeropuerto del Principado. Por ejemplo, en León, al tratarse de un aeródromo militar, es el coronel director quien determina si una aeronave civil puede operar más allá del horario establecido para el aeropuerto.
Además de estas cuestiones, el coronel de la academia ejerce el mando militar sobre zonas reservadas al Ejército del Aire en aeropuertos y aeródromos de su demarcación o se encarga de la coordinación de las operaciones militares aéreas y del desarrollo de los planes de operaciones de Defensa. Además, es el responsable de coordinar con la Guardia Civil y la policía las medidas necesarias para establecer la seguridad de las zonas reservadas, participando en la elaboración de los planes que, en el caso que así se establezca, realicen las unidades que asignen como fuerza de seguridad al despliegue. A su vez, es el coronel director el encargado de determinar qué zonas deben reservarse eventual o permanentemente para el desarrollo de una operación militar, qué medios aéreos serían necesarios y coordinar con los jefes de las unidades que desplieguen en los aeropuertos de su demarcación, las actividades, medios y necesidades de aquellas para una mejor utilización de estos.