Absuelto el director de un hotel acusado de abusos por una empleada despedida

La Audiencia Provincial de León absolvió al director de un hotel de la capital, acusado de un supuesto delito de abusos sexuales por la gobernanta del establecimiento, que había sido despedida acusada de robo.

«No resulta probado que durante las ocasiones en que el acusado pudo, en el periodo de abril de 2008 a mayo de 2009, haber acompañado a la denunciante a revisar las habitaciones del establecimiento, agrediera, golpeara, sujetara físicamente, amenazara, coaccionara o atemorizara de alguno modo a la mujer ni que, utilizando alguno de esos métodos para anular o disminuir la capacidad psicofísica de ella, mantuviera con ella cualquier tipo de contacto físico con significado sexual. Tampoco resulta probado que, aun si utilizar ese tipo de procedimientos, pero conociendo que ella no daba su anuencia, el procesado llevara a cabo con ella contactos corporales de carácter impúdico», dice la sentencia de la Sección Tercera.

El Ministerio Fiscal preguntó a la denunciante si no le parecía extraño que después de estar sufriendo acoso sexual por parte de una persona fuera después a pedirle al acusado el favor de que contratara a su hija. Ella contestó que, antes de contratar a su hija, ella ya recibía acoso sexual, maltrato verbal, recibía cosas extrañas, a veces me tiraba algún comentario verde y, unas veces, ella se las reía, cada vez iba peor hasta que contrataron a su hija».

También preguntó el Ministerio Fiscal si, según el escrito de acusación, lo del ascensor, el empujón, tocarle por las partes, por el culo y el golpe en la cabezas se había producido antes del verano porque había sido en mayo, pero la supuesta víctima contesto que no recordaba las fechas, aunque los momentos eran inolvidables. según su versión.

«Se compartirá, entonces», dice la sentencia, «que en base de los antecedentes consideremos, en contra de lo por ella postulado tan machaconamente en el plenario, que la denunciante, desde la tarde-noche del día 5 de mayo de 2009, esto es, desde tres días antes a que ella presentara el día 8 de mayo de 2009 su denuncia contra el ahora acusado, conocía que este le había denunciado a ella y, se entenderá, una vez más, que, por tal motivo y como ya dejamos dicho, este tribunal recele de la sinceridad de su testimonio».

También hace hincapié la sentencia en las contradicciones sobre el momento del inicio de los supuestos abusos.