El premio Coca-Cola de relato corto moviliza a casi 14.000 jóvenes

Una experiencia inolvidable. Eso fue lo que ocurrió el pasado fin de semana, cuando 940 jóvenes de Castilla y León participaron en la 60 edición del concurso de relato corto de Coca-Cola. Las pruebas del certamen, desarrolladas a través de una plataforma digital, se celebraron en todo el país con casi 14.000 menores.

Con cada nueva edición, los jóvenes participantes sorprenden por su imaginación, creatividad y sinceridad y con sus relatos ofrecen una fotografía social y cultural de España. Por sus relatos, se conocen sus anhelos, aspiraciones y, también, sus inquietudes, según detallan sus impulsores.

En palabras de la directora de la Fundación Coca-Cola, Beatriz Osuna, «la pasión de los jóvenes por escribir y su necesidad de compartir sus historias va más allá de modas y tendencias». «Estamos orgullosos de que hayan vuelto a elegir a nuestro concurso de relato corto un año más para compartir con nosotros su creatividad y su talento», ha apostillado.

A lo largo de la historia del concurso, los estímulos creativos han estado en conexión con eventos de actualidad, como la llegada a la Luna, la entrada de España en la Comunidad Económica Europea o el Mundial de Fútbol de 1982, así como las preocupaciones de una sociedad en pleno cambio, como la crisis climática o el reciclaje. O como aquel 1967 en el que el periodista leonés ya fallecido Antonio Núñez ganó el premio con 15 años. En aquel caso, ‘Los vuelos’ era el tema de redacción. Ganó el primer premio masculino y la organización se lo llevó a Chile.

En esta edición, Coca-Cola ha querido llevar un paso más allá la experiencia creativa y dar voz a los jóvenes desde el momento de la elaboración del estímulo creativo. La compañía ha planteado el reto a los jóvenes de elaborar un texto colectivo con su grupo de clase de 2º o 3º de la ESO con el que describir a un personaje. Un total de 180 relatos colectivos han sido elaborados por 4.000 jóvenes en todo el país, de los que han sido seleccionado los tres estímulos creativos planteados en los distintos días de las pruebas: una nueva niñera, un joven que vive un encuentro con uno de los personajes de sus cómics y un hombre invisible. Con esta acción, Coca-Cola apuesta por estimular la creatividad dando libertad a los jóvenes para elegir a los propios protagonistas de sus historias. Los 13.648 participantes han continuado valiéndose de su talento.