La mitad de las reservas de Fomento se destinarán a mantener las carreteras leonesas
El mal estado de las carreteras requiere grandes inversiones el próximo año. DL
La antigua Consejería de Fomento no anota nuevos proyectos en los Presupuestos de la Junta para 2023 y confía casi la mitad de sus 11,7 millones a la conservación de carreteras.
Los 5,5 millones de euros para atender a las vías de titularidad autonómicas, repartidos en "León oeste, León este y gestión directa León", centran el capítulo 6, en el que aparece aparecen otras partidas diferenciadas para la renovación del firme.
Ahí están los 1,3 millones para el tramo de la CL-626 entre Boñar y Sabero, los 979.979 euros para la CL-631 entre Toreno y Páramo del Sil, los 50.000 euros para la LE-213 de Puente Villarente a Casasola y los apenas 10.000 euros más que escasos para atender las deficiencias que acumula la CL-626 desde Puente Orugo hasta el cruce con autopista del Luna.
Escaso se anota el impulso para la León Braganza. Sólo aparecen 30.000 euros para la redacción del proyecto del tramo leonés, desde La Bañeza hasta el límite con Zamora. Para poco más que estas labores darán los 50.000 euros que se recogen en el documento para definir del puente del río Esla entre La Aldea del Puente y San Miguel de Escalada y los 10.000 euros para la restauración del puente de la LE-524 en Villafer.
No avanzará tampoco mucho la glorieta del cruce de la N-630 con la CL-622 entorno del polígono industrial de León, para la que sólo se destinan 10.000 euros y se fían los 550.000 restantes del coste para 2024.
Entre las novedades hay dos tramos de carril bici pensados para tener continuidad. Habrá 247.533 euros para el que discurra por la travesía de San Andrés en la CL-623, que se debería completar el año siguiente con otros 1,1 millones de acuerdo a la planificación plurianual de la Junta; y 761.626 euros para el que enlazará con Lorenzana, al que le quedarán 3,3 millones para el siguiente ejercicio.
La participación de la Consejería de Movilidad y Transformación Digital se completa con las transferencias de capital para el Centro de Supercomputación. El dinero de la UE nutrirá los 7,1 millones de euros asentados para el funcionamiento de esta infraestructura ubicada en el campus de Vegazana.