Vecinos del Sol, El Roto, Manuela López y Príncipe logran indemnizaciones tras 3 años
Adif paga daños por grietas a decenas de viviendas por la obra de Príncipe
El Administrador reconoce que las excavaciones en los pasos provocaron fisuras a los edificios

Las obras de los subterráneos de Príncipe ocasionaron grietas en los edificios colindantes.
El primer hito de las obras de permeabilidad que planteó el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para coser la fractura que deja el tren en el municipio de San Andrés del Rabanedo, la mejora de los pasos Príncipe en Trobajo del Camino, no sólo sigue haciendo agua tras rematarse a final de enero de 2021, sino que originó decenas de grietas en las viviendas de los edificios colindantes.
Los vecinos de las calles El Sol, El Roto, Manuela López y Príncipe han logrado tres años después, vía judicial, que Adif les indemnice por los daños que causaron los trabajos de ambos subterráneos en sus pisos. El Administrador admite que las obras ferroviarias entre los puntos kilométricos 550 y 850, que comenzó el 22 de junio de 2020 y se prolongaron siete meses en lugar de los cuatro previstos, fueron el detonante de los daños que afectaron a edificios próximos.
Entiende que las vibraciones de las excavaciones con maquinariua pesada en esos pasos abrieron grietas en los techos y paredes de algunas viviendas y en los elementos comunes de los inmuebles.
En la resolución se concluye que «se estima que los daños observados de grietas y fisuras son compatibles con las vibraciones y fuertes temblores trasmitidos al inmueble durante la ejecución de los trabajos de excavación y compactación del terreno en la obra de Adif para la adecuaciación» de los pasos.
Así que la conexión entre la avenida de Párroco Pablo Díez con el barrio de La Sal, que se construyó en 1994 para evitar atascos en El Crucero y se reformó hace cuatro para evitar que el agua que se acumulaba en ellos cada tormenta los bloqueara, ha tenido consecuencias para los vecinos de la zona y Adif.
Precisamente esos subterráneos volvieron a ‘ahogarse’ esta misma semana. La bomba de achique falló de nuevo como en un calco de lo ocurrido el pasado septiembre, cuando también se cerraron al tráfico al confluir el mismo fallo con la «desintegración» de la agrupación de Protección Civil, de manos caídas por falta de una sede digna desde el pasado 5 de agosto en que decidieron no acudir a emergencias. Esos voluntarios tradicionalmente salvaban las inundaciones de estos pasos con su labor, cuestión que ni hace cuatro meses ni ahora se produjo.
De modo que la maldición que parecía haberse alejado de estas infraestructuras tras varias obras, vuelve a cumplirse con otra inundación, lo que convierte en realidad el tradicional mantra de que cada tromba de agua colapsa estos subterráneos. Ya a lo largo de 2021, recién inaugurados y como si de una condena se tratara, los pasos se tuvieron que clausurar en varias ocasiones porque las bombas de extracción se atascaban. Lo mismo sucedió en 2022 con varias actuaciones de Protección Civil de San Andrés y de los Bomberos de León aún para achicar el pequeño río que se formó en el interior, ayudados del 112.
La anterior Corporación del PSOE consiguió cambiar las bombas por otras más potentes para gestionar más agua, tras un rifirrafe con Adif sobre quién debía de encargarse de solucionar el asunto, pero el problema resurgió con el cambio de equipo de gobierno porque para su buen funcionamiento requieren una limpieza constante. El Gobierno leonesista probó entonces a sustituir las placas de sumidero por otras de agujero de mayor tamaño que parecían haber sido el complemento perfecto para evitar inundaciones, pero tras unos meses de alivio el agua volvió a colapsar los subterráneos. Los técnicos opinan que la obra de reforma de estas infraestructuras acometida por Adif en el año 2020 no fue adecuada, lo que sigue repercutiendo tanto en el Ayuntamiento de San Andrés, que tiene que tratar de resolver esos pequeños caos cuando la meteorología es adversa y recoger las críticas, como en los vecinos que padecen el cierre de unos viales que evitan un rodeo.