Los autónomos estallan ante el inminente cierre de negocios: “No somos el saco roto del Estado”
No se oponen a las mejoras laborales para los trabajadores por cuenta ajena, pero critican que los costes de estas medidas recaigan casi exclusivamente sobre ellos

Protesta de trabajadores autónomos
La organización Autónomos Unidos para Actuar (Aupa), que representa a miles de autónomos en toda España, ha emitido un contundente comunicado en el que denuncia la situación de desamparo que enfrentan los trabajadores por cuenta propia ante las crecientes exigencias económicas y legislativas del Estado.
Bajo el lema “Los autónomos no somos el saco roto del Estado”, Aupa reclama medidas urgentes para garantizar la supervivencia de un colectivo clave para la economía y la vida de los barrios.
El comunicado subraya que los autónomos no se oponen a las mejoras laborales para los trabajadores por cuenta ajena, pero critican que los costes de estas medidas recaigan casi exclusivamente sobre ellos.
Por ejemplo, el aumento del Salario Mínimo Interprofesional implica que los autónomos asuman íntegramente el incremento de las cotizaciones de sus empleados, mientras que la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas obliga al autónomo a compensar el tiempo perdido sin remuneración ni descansos adicionales. Además, medidas como la ampliación a 10 días por fallecimiento no contemplan el impacto en los autónomos, que carecen de bajas remuneradas.
Aupa también critica la propuesta del Gobierno de incrementar las cuotas de autónomos entre 11 y 206 euros mensuales a partir de 2026, con subidas previstas hasta 2031. Según los cálculos de la organización, los autónomos con menores ingresos (hasta 670 euros al mes) pagarán un 32,4% de sus ingresos en cuotas, mientras que los de mayores ingresos (más de 6.000 euros) destinarán solo un 13,3%. “Esto no es progresividad, es regresividad disfrazada”, denuncian.
El impacto en los barrios
La organización destaca el papel esencial de los autónomos como “el alma de nuestros barrios”, dinamizando la economía local, reduciendo emisiones y preservando la identidad de las comunidades. “Cada autónomo que cierra es una pieza perdida de un puzzle esencial. Nos arriesgamos a ciudades fantasma, sin comercio ni vida”, advierten, subrayando que estos pequeños negocios cumplen de facto con los objetivos de la Agenda 2030 al fomentar el consumo local y la sostenibilidad.
Para revertir esta situación, Aupa propone medidas concretas:
- Cuota cero o simbólica para autónomos con ingresos inferiores al SMI (1.166,70 euros/mes).
- Libertad para elegir la base de cotización, eliminando las imposiciones actuales.
- Distinción legal entre autónomos según su perfil (sin empleados, con pocos empleados, profesionales liberales, microempresas).
- Financiación pública para costear mejoras laborales, mediante bonificaciones o reducciones en cotizaciones.
- Mejora de prestaciones, como un paro accesible, jubilación digna y permisos retribuidos equiparables a los de los trabajadores por cuenta ajena.
Acción
Aupa concluye con un mensaje claro: los autónomos no buscan privilegios, sino “igualdad real, proporcionalidad y respeto”. Instan al Gobierno a observar la realidad de los pequeños negocios, especialmente en zonas rurales, y a legislar de forma adaptada a sus necesidades. “Muchos estamos al borde de la extinción. Salgan a la calle y propongan leyes que protejan el tejido vivo de la economía de proximidad”, finaliza el comunicado.
La organización espera que sus demandas sean escuchadas para evitar el cierre masivo de negocios que sostienen la vida de los barrios y la economía española.