Los pisos turísticos apagan el revuelo de Casa Luisón

Imagen del estado actual del nuevo edificio en el solar vde Casa Luisón. RAMIRO
En silencio, a la vista de todos, la polémica de la construcción en el solar del restaurante Casa Luisón, adosado a la muralla, ha decrecido a medida que se incrementaban las alturas del edificio. Dos años después del revuelo, el inmueble ya está en su fase definitiva, listo para el reparto interior de los seis pisos turísticos con los que harán negocio los propietarios del terreno.
Pese a que el PP y UPL intentaron bloquearlo, con el ánimo de liberar la fortificación histórica, los dueños del suelo hicieron valer el permiso que tenían y rechazaron cualquier expropiación, mientras el equipo de gobierno del PSOE se amparaba en que no podía hacer nada.
La comisión creada llegó a proponer un cambio urbanístico para que, en adelante, no pudiera repetirse con otros inmuebles de la calle Serradores. Pero nada se ha hecho por ahora.