El obispo critica el uso de la cofradía para difundir la homosexualidad

En una llamada al teléfono del lector de este periódico, el pasado 14 de noviembre, se publicó una carta firmada por Miguel Angel D.F. en la que daba las gracias a la Junta de Seises de la cofradía de Cristo del Gran Poder «por habernos permitido a un grupo de homosexuales participar en la Semana Santa de León», y especialmente al abad, Guillermo Gallego. Precisamente fue a través de este mensaje como la Junta de Seises se enteró de que un grupo de los hermanos es gay. El portavoz de la cofradía, Santiago García, insistió en que lo normal es ser tolerantes con la condición personal de cada uno. «Cuando se admite a una persona en la cofradía no es por su condición sexual, sino porque esta cofradía es católica y por lo tanto admitimos a todas las personas que practiquen esta religión», explicó Santiago García que mostró su contrariedad por el hecho de que se haya utilizado la propia hermandad para dar a conocer este hecho. Aseguró que pedirán información al Obispado de León para conocer con exactitud si los hermanos homosexuales pueden continuar siendo papones. «Todo esto me ha desbordado y ante el desconocimiento de la legislación canónica preferimos que sea el Obispado el que nos aclare la situación», dijo. A este respecto, el portavoz de El Cristo del Gran Poder mostró su preocupación ante los continuos comentarios irónicos que están surgiendo y que están dañando la imagen de la propia hermandad leonesa que se fundó en 1994.. La iglesia no quiere polémica El obispo de León, Julián López no quiso manifestarse ayer sobre este hecho hasta no conocer, de manos de los cofrades, esta cuestión, pero sí mostró su respecto a la condición sexual de estas personas y pidió que no se utilizara la cofradía para hacer este tipo de manifestaciones. «Respeto su intimidad, pero también pido que no se aproveche la ocasión de pertenecer a una cofradía para fines que van más allá de los estrictamente religiosos», recalcó el obispo leonés. Por su parte, el vicario general de la Diócesis de León, Pascual Díez Escanciano, manifestó ayer su sorpresa ante este hecho. Así, afirmó: «No tengo respuesta ni criterio, estoy muy sorprendido». A última hora de la tarde de ayer el Obispado de León no había recibido ninguna petición de reunión con los miembros de la cofradía para tratar este asunto aunque Díez Escanciano sí manifestó que «les recibirán y hablarán de ello». Por su parte, el Miguel Ángel D.F., no quiso entrar en polémicas, y admitió su condición de homosexual y la desvinculó de la religión porque -según aclaró- «no le importa a nadie y en una cofradía eso no cuenta». Junta Mayor A pesar de esta polémica ayer se celebró una reunión que ya estaba prevista con antelación en la que se dieron cita, por primera vez todos, los abades de la Junta Mayor de la Semana Santa leonesa con el obispo de León, que participará por primera vez en la Pasión que celebra la capital. Un encuentro en el que Julián López mostró su intención de participar en los actos de la misma. Además, se repasaron cuestiones como el pregón.