La oposición también denunció posibles ilegalidades medioambientales en estos proyectos
El PSOE acusa a la CHD de sectarismo en la financiación de obras fluviales
De las 30 iniciativas previstas en León, sólo cuatro se harán en ayuntamientos socialistas
Ángel Villalba durante la rueda de prensa celebrada en Valladolid
El PSOE de Castilla y León lanzó ayer duras críticas contra la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) y su todavía presidente, José Carlos Jiménez, al que acusó de estar dando vía libre a pequeñas obras de limpieza y adecuación de márgenes fluviales a favor de ayuntamientos gobernados por el PP y de contravenir la dinámica de funcionamiento ordinario que debe seguir este órgano, actualmente en funciones tras las pasadas elecciones generales. En concreto, el secretario regional de los socialistas, Ángel Villalba, denunció que de los 127 proyectos de obras que en estos momentos se encuentran en vías de adjudicación, 105 corresponden a municipios gobernados por los populares y solo 22 a localidades con alcaldes socialistas. En León, el PSOE explicó que de los 30 ayuntamientos en los que está prevista alguna de estas obras, por un valor total de 960.000 euros, 24 son del PP y tan sólo 4 del PSOE, lo que apenas supone el 13% frente a la representación real de los socialistas, que supera el 38%. Según Villalba, este trato «sectario» se produce en ocho de las nueve provincias de la comunidad ya que se trata de obras de pequeña cuantía, -entre los 30.000 y 60.000 euros-, que pueden ser adjudicadas directamente por el presidente de la CHD sin pasar por un concurso público. En total, todas ellas supondrían una inversión de 4,2 millons de euros, de los que solo el 17,59% corresponde a ayuntamientos socialistas, a pesar de que el PSOE representa el 24% del total. Por todo ello, los socialistas han remitido una carta al presidente de la Confederación, en la que se le pide que suspenda la adjudicación de estas obras. Además, Villalba denunció «la dudosa legalidad medioambiental» de estos proyectos, puesto que, según afirmó, diversos ayuntamientos, asociaciones ecologistas y particulares han puesto de manifiesto posibles incumplimientos en el procedimiento de elaboración de estos proyectos, que no cuentan con el preceptivo informe medioambiental previo. Por último, Ángel Villalba expresó el deseo de que el futuro presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero «no sea un delegado del gobierno para el campo y los ríos, sino que reivindique ante el Ministerio las necesidades de la comunidad». Respecto al informe de la Abogacía del Estado que reclama a los regantes del Carrión las tasas por el trasvase de aguas de Riaño, Villalba anunció que pedirá al nuevo Gobierno que este pago no tenga por qué ser proporcional, dada la excepcionalidad de la obra.