Empieza a felicitar la Navidad, porque ¡ya ha llegado!

¡Qué ganas teníamos! Todo un año esperando para que llegasen y ya están aquí las Navidades, esos días del año tan especiales en los que toca estar en familia, cantar villancicos, hacer y recibir regalos, comer turrón...todo ello recordando el nacimiento del niño Jesús, la llegada de los Reyes Magos y todos los acontecimientos que motivan estos días festivos. Y cómo no, las vacaciones, esos días de descanso que tenemos para poder ayudar en casa a montar el belén o a poner el árbol y, por qué no, ayudar un poco en la cocina a preparar las cenas y comidas para toda la familia o para aquellos que se animen a compartir con sus seres queridos la Nochebuena o cualquier otro día. Es tiempo de felicitaciones, de desear a quienes están a nuestro alrededor una felices fiestas, y pedir paz, alegría y los mejores deseos para el nuevo que comienza en breve. Son los últimos días del año, en los que también se hace balance de los últimos 365 días y de todo lo que nos ha pasado en ese tiempo, en lo que podemos mejorar para el próximo y en pensar en ser un poco más solidarios, que nunca viene mal. También hay un hueco para la diversión, para celebrar con alegría que hemos pasado un año más y para entrar con ilusión en el nuevo, esperando lo mejor para todos en en el 2005. Y tampoco hay que olvidar las tradiciones, las cosas más típicas que le dan ese toque especial a la Navidad, el ramo, muy leonés, los dulces, tomar las uvas el día 31 al ritmo de las campanadas y, si te atreves, pedir el aguinaldo de puerta en puerta. Hay que tener ganas y buen humor, también reflexionar, divertirse, poner entusismo en aquello que hacemos para tratar de mejorar. Después de todo esto habrá llegado la hora de volver al cole, con algunos de los regalos que nos han traído los Reyes Magos metidos en la mochila. Hasta entonces, ¡FELIZ NAVIDAD!