La teleasistencia a domicilio ya llega a 225 usuarios del municipio

El Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo renovará el convenio con el Imserso y la Federación de Municipios y Provincias (Femp) para el desarrollo del programa de teleasistencia domiciliaria. A lo largo de 2006, el número de beneficiarios del Ayuntamiento se incrementará en 17 personas, pasando de 208 el pasado mes de diciembre y 225 a finales año pasado. El coste total de este servicio para las arcas municipales, un servicio gratuito para el beneficiario, es de 60.297 euros, de los que casi 40.000 serán financiados por el Imserso. Éste fue uno de los puntos presentados ayer por la concejala de Bienestar Social, Concepción Rodríguez Carús, en la comisión informativa que preside. El servicio de teleasistencia consiste en que el beneficiario lleva una pequeña alarma colgada al cuello y en caso de necesidad (caída, mareo, desmayo...), apretando solo el botón se pone en contacto vía telefónica con la central de alarmas. Rodríguez Carús también informó de las acciones que se están llevando a cabo desde el programa del Consejo Social «La diversidad nos enriquece». La edil socialista explicó que debido al notable y progresivo aumento de extranjeros y de población inmigrante en el municipio de San Andrés en los últimos años, desde el Consejo Social se ha detectado la necesidad de realizar actuaciones dirigidas a fomentar la integración de estos colectivos, así como promover el respeto, el conocimiento y la comunicación entre personas de diferentes razas, países, culturas, creencias, etcétera. Prevenir conductas racistas Los objetivos de esta iniciativa son prevenir actitudes y conductas racistas y xenófobas en el municipio de San Andrés y sensibilizar a la población en general, asociaciones y grupos organizados del municipio sobre la situación actual de la inmigración. Una de las últimas campañas ha sido la distribución de 400 calendarios de mesa y 4.000 de pared a través de los que se invita a la población de San Andrés a huir de estereotipos como «los emigrantes nos quitan el trabajo» y apostar por la integración cultural. Asimismo, se han editado 4.000 carteles informativos que se distribuirán entre las comunidades de vecinos, previo consentimiento de las mismas, en los que se especifica «En este edificio son bienvenidas todas las personas sin distinción de raza, procedencia, religión, idioma o cultura, porque vivir es convivir». Otro de los puntos tratados fue la renovación de la ayuda del Ayuntamiento de San Andrés al proyecto Kampemba, para la creación de huertos familiares en el Congo, con 12.000 euros (promovido por Cáritas Diocesana de Astorga y con cargo del 0,7%). Este proyecto es la continuidad del subvencionado los dos últimos años. La subvención aprobada por el Ayuntamiento de San Andrés servirá para la compra de semillas, abonos y herramientas necesarias para el cultivo de los huertos familiares en este lugar. Los objetivos del proyecto «Kampemba» son aumentar la calidad de vida de las familias implicadas en el proyecto, aumentar la producción de bienes básicos de consumo, mejorar la alimentación, fomentar la ocupación de los jóvenes de estas familias y familiarizar a los hijos de éstas en el cultivo de la tierra.