El gran emisario del Sur para 44 pueblos funcionará a final de año

Aunque no suelan verse, las tuberías que absorben las aguas fecales, las que llevan el agua limpia a los hogares y las que evitan las inundaciones son cruciales para una buena calidad de vida y el mejor síntoma de la modernidad de los pueblos. Sin embargo, el área metropolitana aún esconde muchas poblaciones que siguen viviendo con rudimentarios sondeos, viejas depuradoras y emisarios obsoletos. Una situación que, tras años de abandono, intentan corregir ahora la Junta y la Diputación con suculentas subvenciones para renovar las redes y ampliar los sistemas depurativos que eviten que los vertidos lleguen a los ríos leoneses casi sin tratar. Villaquilambre, Sariegos, Valverde y Chozas son cuatro de los municipios del alfoz que ya se han puesto manos a la obra con unos planes de saneamiento ambiciosos para actualizar sus redes que se traducen en más de diez millones de euros de inversión. También, el gran emisario del Sur metropolitano, que dará servicio a los municipios de Valdefresno, Villaturiel y Villasabariego, está a punto de rematarse. Se trata de una de las obras de mayor envergadura que se han emprendido en el entorno de la ciudad y que permitirá reformar la red de 44 pueblos con una inyección económica superior a los 715.000 euros. La Diputación aporta la mitad de esa cantidad y el resto, los ayuntamientos beneficiados. Valdefresno ya acometió el año pasado casi en solitario los primeros kilómetros para canalizar sus aguas residuales hasta Sanfelismo, impulsado por las nuevas viviendas que se van a desarrollar cerca del Alto del Portillo. Desde agosto La buena relación con sus otros dos socios de la mancomunidad, Villaturiel y Villasabariego, hizo que aprobaran en conjunto la continuidad de los trabajos para poner en marcha un emisario común, para una población estimada de 20.000 habitantes, que sustituyera a los tres que se utilizan actualmente. La obra comenzó el pasado mes de agosto y, según las previsiones, estará finalizada antes de que concluya el año. Las tuberías, que ocuparán tres kilómetros entre Sanfelismo y Puente Villarente, se están colocando en la margen izquierda de la N-601 León-Valladolid. La mayoría dispondrán de un metro de diámetro para asumir el aumento poblacional que se espera de cara a la próxima década gracias al desarrollo urbano. De hecho, en Puente Villarente, el proyecto ya ha tenido en cuenta un área residencial que disponía de una infraestructura deficitaria que ahora se solucionará con nuevas tuberías de 400 milímetros que se conectarán al emisario general. Los técnicos precisan que los trabajos de excavación de las zanjas, relleno, compactación, traslado a vertedero de los residuos y colocación de registros «están muy avanzados». Por eso confían en agilizar los plazos previstos y llegar a rematar la obra el próximo mes de diciembre. De momento, falta cruzar la nacional N-601 a la altura de Puente Villarente y rematar varios pasos por debajo del denominado canal de Arriola, que baña la zona.