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«La enfermedad es como una zorra silenciosa»
El trasplante es la solución para los enfermos renales terminales por eso inciden en la concienciación social para aumentar las donaciones e instan a la prevención para evitar la diálisis
Candela Soto, a la izquierda, sentada, junto a parte de los miembros de la junta directiva de Alcer
león
No duele, no avisa y cuando aparecen los primeros síntomas suele ser demasiado tarde. Ese fue el caso de Candela Soto, que el día 19 de este mes hará diez años que se sometió a un trasplante de riñón. «Me mejoró la calidad de vida, porque antes me sometía a diálisis peritoneal en mi casa, pero tomo un montón de pastillas al día», dice esta mujer que en ocasiones se muestra resignada ante la falta de apoyos y en otros momentos reivindica el derecho a llevar una vida mejor. «Esta enfermedad es como una zorra cuando entra en un corral, no avisa, silenciosa», asegura. Ella comenzó con infecciones repetidas de orina, «hay personas que van al médico sin síntomas, se hacen una analítica y van derechos a la diálisis», alerta, «lo que nos ha pasado a nosotros le puede pasar a cualquiera en cualquier momento», advierte y anima a la concienciación para que aumenten las donaciones.