Las ayudas se aplicarán a coches usados de hasta cinco años

Las ayudas directas a la compra se aplicarán también a los coches usados de hasta cinco años de antigüedad, que contarán con 500 euros por parte de las arcas del Estado y otros 500 de las administraciones regionales que se sumen al plan. El programa original del Ministerio de Industria limitaba a los dos años la edad del vehículo seminuevo a adquirir, pero tras negociarlo ayer con el sector el departamento dirigido por Miguel Sebastián ha ampliado la horquilla. Los coches usados no contarán, eso sí, con los 1.000 euros que darán los fabricantes cuando lo que se adquiere es un coche nuevo. La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) destacó que la ampliación de dos a cinco años «ayudará, sobre todo, a las rentas más bajas, que son las que adquieren con más frecuencia turismos seminuevos». En estas operaciones se deberá entregar para achatarrar un vehículo de más de doce años. En principio, los concesionarios harán constar de forma clara en la factura el descuento correspondiente a cada parte (Estado, comunidad autónoma y marca). Para recobrar el dinero público se enviarán por vía telemática esas facturas a la Fundación Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil (Fitsa), participada por las patronales de fabricantes de coches y de componentes así como por los ministerios de Industria, Educación e Interior. El dinero de las marcas no pasará por este mecanismo y serán las multinacionales las que traten directamente con los vendedores. Queda por aclarar cómo van a compaginar las marcas las ayudas directas de 1.000 euros con los sustanciosos descuentos ofrecidos en los últimos días, en agresivas campañas de publicidad que contaban con que el Plan 2000E comenzara en junio.