El CTR ha perdido diez millones por no rentabilizar la recuperación de residuos

Ineficiente gestión. Dos palabras que el plan económico-financiero 2010-2015 diseñado por Gersul para salvar su agónica situación económica utiliza de forma constante para referirse al papel desempeñado por la empresa adjudicataria del CTR -"la UTE Legio VII-" desde que el sistema de tratamiento de residuos provincial se puso en marcha.

Así, el informe revela que desde el otoño del 2004 -"fecha de inauguración del complejo de San Román de la Vega-" la empresa ha provocado pérdidas al consorcio que rozan los diez millones de euros por la inadecuada gestión de los residuos: bajo rendimiento sobre lo previsto por la propia ute en su oferta en la recuperación de productos reciclables (casi cuatro millones); no vender la electricidad que debería haber producido desde el principo (cerca de tres millones) y la anticipada amortización del vertedero en sus primeros cuatro años de vida (tres millones).

También se pone de manifiesto, aunque no se cuantifican, las pérdidas por el bajo rendimiento en la producción de compost. La planta genera un 7%, cuando el ofertado por la empresa se elevaba justo al doble.

Las estimaciones fijan una falta de ingresos superiores a los 700.000 euros anuales por no vender la electricidad a la red general, evidenciando además el retraso en iniciar esta producción, que no ha permitido ahorro en la factura de luz de la propia planta (unos 600.000 euros por ejercicio), así como la ineficacia en la gestión de los sitemas de producción de biogás y energía eléctrica.

Dos millones al año deja de ingresar también por no explotar adecuadamente la recuperación de residuos con salida en el mercado. «En definitiva, si la ute estuviera prestando el servicio de acuerdo con los compromisos adquiridos por la oferta presentada, el importe que se recaudaron por este concepto ascendería a unos 3,9 millones anuales», asegura el informe. En el 2008, por ejemplo, Gersul ingresó cerca de 1,2 millones de euros.

Ante esta situación, el plan prevé la contratación por parte del consorcio de inspectores para vigilar el complejo de San Román de la Vega y las plantas de León y Ponferrada.

Vigilancia . Quiere control exhaustivo sobre el sistema de pesadas, recuperación de productos y, sobre todo, verificación del flujo de residuos entre instalaciones de todo el sistema. Igualmente, seguimiento del proceso de clasificación, compostaje y biometanización de la empresa en el CTR y control diario de pesada. Además, propone la aplicación de sanciones a la ute y la aprobación inmediata de un reglamento de explotación.

En estos momentos la deuda de Gersul con la empresa Legio VII se sitúa prácticamente en los 50 millones de euros. El plan económico-financiero, aprobado hace unos días por la asamblea general, prevé la necesidad de alcanzar el saneamiento del consorcio en un plazo no más allá de los tres años.

Un crédito de 20,9 millones. El objetivo es que a finales del 2015 se haya corregido la situación actual de inestabilidad presupuestaria, el ahorro neto ajustado sea positivo y que no exista déficit para gastos generales. Para alcanzar esta meta la asamblea autorizó la concertación de un crédito cercano a los 20,9 millones. El plan propone una subida del recibo del 6% para los años 2010 y 2011, el 3% en el 2013, el 5% en el 2014 y el 6% en el 2015. En el 2012 no se modificará.