Villagatón y Magaz no renunciarán al riego del pantano cedido a los regantes

Ni el alcalde de Magaz de Cepeda, José Ángel García, ni su homólogo de Villagatón-Brañuelas, Benjamín Geijo, quieren renunciar al cupo de agua para el riego que les pudiera corresponder de la presa de Villagatón a los regantes de sus respectivos municipios. García admitió que en la actualidad en su ayuntamiento quedan muy pocos agricultores, pero rechazó la idea de «hipotecar el agua» para las generaciones futuras. «No sabemos lo que pueden necesitar nuestros hijos», apuntó, al tiempo que indicó que «igual cuando llegue el aparcelamiento más gente trabaja la tierra». García también resaltó que otro de los fines del embalse era regular el caudal del río Porcos, y que su existencia puede contribuir a aumentar el agua de la presa de Villameca.

Geijo, por su parte, advirtió de que «la presa de Villagatón fue construida» para los regantes de ambos términos municipales. «La Junta no puede dárselo al sindicato de regantes de Villameca y dejar a estos dos ayuntamientos fuera de algo que se hizo para su beneficio», señaló. Ambos alcaldes manifestaron su intención de trasladar a la Junta estas demandas.

Por lo que respecta al impago de las expropiaciones de las fincas particulares para construir la presa, Geijo consideró que es la Junta la Administración que debe pagarlas, como también debe pagar el monte de las pedanías de Villagatón y Brañuelas ocupado por el pantano, dijo. «La Junta decidió asumir la presa, y por tanto también asumió todo lo que se tenga que pagar», dijo Geijo. El alcalde acusó a la Administración autonómica de efectuar «una ocupación ilegal» de terrenos, al estar éstos anegados por el agua sin que sus propietarios hayan percibido compensaciones. «Si no las pagan pediremos que se desembalse el agua y no se vuelva a llenar la presa hasta que no hayan pagado», advirtió Geijo.

Cesión. Respecto a la fórmula de cesión del monte, que le fue criticada por el pedáneo de Villagatón, Manuel de la Torre, Geijo admitió que «es cierto que el Ayuntamiento en su día cedió los terrenos para construir la presa» y los puso de forma libre a disposición de la Diputación. «Era un acuerdo verbal con las juntas vecinales de Villagatón y Brañuelas de entonces», con vistas a que las comunidades de regantes de ambas localidades y de Magaz pudieran beneficiarse del agua, dijo. Geijo admitió que, a estas alturas, ese acuerdo verbal «no tiene validez ninguna», y recordó que aquellas juntas de regantes «ahora no existen». El alcalde de Villagatón calculó que el pago de los terrenos ocupados por el embalse puede rondar ahora los noventa mil euros. «Es increíble que por esa cantidad la Junta esté generando un problema tan grave», dijo. Geijo también criticó que la Administración autonómica «ha tomado decisiones unilaterales» en este asunto «sin contar con el Ayuntamiento ni con los posibles regantes».