«Si la Junta no participa en la estación de autobús dejará una herida abierta»

— La estación de autobuses es el tema de actualidad, ¿Cómo avanza el proyecto para solucionar la ausencia de terminal?

—Seguimos trabajando en la idea de construir una nueva, para lo cual estamos buscando el apoyo de la Junta que sería quien realmente tendría que costear la terminal. En cualquier caso, el compromiso que existe por parte del Ayuntamiento, y lo vamos a hacer, es que si no tenemos ayudas lo asumiremos con recursos propios dentro de esta legislatura. Por otro lado no se descarta, si se alcanzara un acuerdo con los propietarios de la vieja estación, la reapertura de la misma, aunque las negociaciones que se hicieron en su momento no llegaron a ningún acuerdo. De todas formas, no es justo, que las administraciones estén subvencionado a compañías de aviación y se estén olvidando de las personas que realmente necesitan su apoyo. Creo que si la Junta no apoya una infraestructura como la estación de autobuses cometerá una gran torpeza. Si finalmente se soluciona sin su participación, será una herida que va a dejar abierta en La Bañeza durante años y que los ciudadanos difícilmente entenderán.

—Se ha denegado el parque de bomberos para la comarca que lleva comprometido desde el 2001, ¿Cómo se ve esta situación desde el Ayuntamiento?

—Es un ejemplo más de la discriminación que tenemos en las zonas rurales. Se habla de fijar población, de que se mantenga la vida en los pueblos... pero en contraste con estas declaraciones, que son fáciles de hacer por los políticos que gobiernan en las administraciones autonómica y provincial, lo que vemos es muchas veces un olvido. Para los ciudadanos y empresarios también es necesario contar con la garantía de que cuando se producen los incendios las consecuencias no sean tan lamentables, que no lo serían si tuviéramos un parque de bomberos con personal profesional.

—La adecuación de las riberas ha devuelto algunos espacios de ocio, ¿Cree que estas mejoras han revalorizado el parque de Charo González?

—La recuperación de las riberas es una de las obras que más satisfacción nos ha dado por la aprobación que ha tenido por parte de los ciudadanos, que ha sido un éxito total. El parque de Charo González, sin embargo, es una zona nueva, donde los árboles o las sombras aún son muy limitadas, pero que estamos haciendo un esfuerzo para mantenerlo en buen estado. Las restricciones económicas no nos han permitido hacer más inversiones en ese parque, por el momento, para aumentar los atractivos de la zona. El proyecto, no obstante, ya se planteaba a largo plazo.

—La Azucarera ha anunciado inversiones de 35 millones de euros, ¿en qué invertirá el Ayuntamiento lo que perciba por el Icio?

— Es muy pronto para hablar de eso, porque de esos 35 millones no sabemos si todos se van a destinar a la fábrica de La Bañeza y dentro de las obras previstas, qué se va a hacer. De todas formas, nos vendría muy bien una inyección, por pequeña que sea. Sin embargo, lo que más nos importa de la Azucarera es que haciendo esta inversión la empresa fija su futuro, por muchos años, en la ciudad. Es una industria fundamental para la economía local, que mueve mucho de diferentes sectores a su alrededor.

—Y tan trascendental como es La Azucarera ¿Por qué el Ayuntamiento no se ha posicionado más abiertamente a favor del mantenimiento de la cuota?

—En principio el mantenimiento de la cuota no creo que esté en discusión. He hablado con representantes de los sindicatos de agricultores y creo, que es muy dificil que se puedan derivar las cuotas de una fábrica para otra. Lo que si nos preocupa realmente es que el precio de la remolacha tiene que ser lo suficientemente atractivo para que los agricultores sigan o vuelvan a apostar por este cultivo. Es esencial que tenga un precio justo, que haga rentable la remolacha que tanto en nuestra comarca como en la ciudad es vital.

—¿Qué mecanismos tiene el Ayuntamiento para intentar frenar el paro en la ciudad?

—Es muy dificil desde la administración local hacer iniciativas, más cuando somos ayuntamientos pequeños, pero es verdad que el año pasado, además de los planes de la Junta y la Diputación, el Ayuntamiento aportó otra cantidad para contratar a una serie de personas en situación de desempleo durante unos meses. La mejora, sin embargo, pasa mucho más por no poner trabas a todos aquellos que quieren invertir. No obstante, La Bañeza tiene un tejido industrial importante que ha aguantado la crisis de manera ejemplar.

— ¿Qué balance hace de lo que lleva de este mandato?

—Por un lado es la legislatura donde hemos culminado algunos proyectos importantes que benefician el aspecto de la ciudad y por otro, está siendo la legislatura de los ajustes, de mirar todo para seguir haciendo las mismas actividades pero con menos dinero. De ésto lo que tenemos que sacar es algo positivo y es que aunque volvamos a los tiempos de bonanza, tenemos que haber aprendido la lección de que hay que ser cuidadosos con el gasto y priorizar las inversiones más necesarias y útiles para los ciudadanos.

—Objetivos para el 2014

—Fundamental es mantener el ritmo que ha existido en los últimos años en La Bañeza en cuanto a inversiones. No olvidemos que ahora mismo está a punto de iniciarse la obra de la depuradora con una inversión de casi 5 millones de euros, financiada por el Gobierno de España, que no va a costar ningún euro a los bañezanos. Éste es de los pocos ejemplos que existen en la provincia de importantes inversiones en municipios con características similares a la ciudad. Además, dependiendo de los recursos que nos vayan llegando podremos ampliar las inversiones y continuar con el mantenimiento y reforma de algunas zonas, sobre todo la pavimentación, renovar aceras o continuar con la mejora de la accesibilidad. Seguir en la línea de mejorar el aspecto de la ciudad y, por supuesto, el fin último es que La Bañeza siga siendo una ciudad atractiva para los inversores, dando facilidades a aquellos empresarios que quieran apostar por la ciudad. También trabajamos mucho en el tema del turismo, pues estamos en un punto estratégico.