«La vigilancia corresponde a Medio Ambiente y el Seprona»

La resolución de Medio Natural de adoptar medidas excepcionales ante el envenenamiento de seis rapaces en el coto privado de San Cibrián de Ardón sorprendió ayer al presidente de la junta vecinal, Gonzalo González, que, si bien conocía los hechos a través de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, aseguró no haber recibido notificación alguna sobre la suspensión. Según su versión, el último contacto entre la pedanía y la Junta se produjo el mes pasado, cuando la primera presentó alegaciones al expediente administrativo.

González considera un castigo duro para la junta vecinal la veda total, ya que las rapaces «pudieron haberse envenenado fuera del coto y haber muerto después», ya dentro de los terrenos del aprovechamiento. En cualquier caso, «nosotros nada tenemos que ver con el envenenamiento». Además, la vigilancia «corresponde a los agentes medioambientales y al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. Nosotros, si encontramos algo, sólo podemos ponerlo en conocimiento de la autoridad competente».

En las 1.265 hectáreas que forman el coto cazan «los vecinos aficionados y otras personas de fuera». El cese de actividad supone una pérdida de ingresos para la entidad local menor de 5.000 euros, aproximadamente. «No creo que nadie en un coto envenene aves, conociendo los perjuicios que la acción conlleva», señaló el pedáneo.