Problemas detectados en puntos de venta, industrias y locales hosteleros

Los consejos determinaron ayer tres vías en las que se produce el fraude, comunes a todos: el que cometen industrias no pertenecientes a estas entidades, puntos de venta y establecimientos hosteleros, que comercializan productos bajo la denominación registrada por ellas. Esto supone pérdidas anuales a estas empresas difíciles de calcular, y otros perjuicios derivados del hecho de que estos productos fraudulentos no pasan los mismos controles que los amparados, ni gozan de la calidad avalada por los consejos. Alguna de estas situaciones, además, es difícil de detectar, pero otras, como en el caso de productos etiquetados, es más sencilla. Esta es la primera vez que los consejos reguladores buscan una solución común a este problema, en busca de una mayor presión a la administración competente que derive en una actuación decidida contra las empresas que incurren en el fraude. El consejo de la Cecina de León, que agrupa a 20 industrias, ha intensificado en los últimos años su política contra el fraude y los controles a sus empresas.