El sector de fitosanitarios quiere que los puntos limpios asuman los envases

Corresponsal de Diario de León Según el Real Decreto, los envases de fitosanitarios deberán ser puestos en el mercado a través de un sistema de depósito, devolución y retorno, o bien a través de una empresa sin ánimo de lucro que deberá demostrar que cuenta con la capacidad suficiente para implantar un sistema de recogida selectiva de los envases. Con este fin nacería Sigfito. Hasta la fecha el sistema ideado está basado en que los fabricantes pagarían hasta 18 céntimos por envase para dedicarlas a su recogida y después se olvidarían del tema. Deberían ser los distribuidores los que tendrían que recogerlos mediante contenedores adecuados en sus almacenes. Éstos se niegan porque aseguran que les acarrearía elevados gastos. Además, un estudio realizado en La Rioja desveló que la recogida supondría más de 1,80 euros por envase, en lugar de los 18 céntimos que pagarían los productores. Y es que los gastos son muchos, como los seguros especiales para el almacenamiento de este tipo de envases o cartillas para el traslado hasta la planta de eliminación. Por todo ello, los distribuidores abogan por que los envases se recojan a través de puntos limpios ubicados en las cabeceras de comarca para que los agricultores depositen allí los envases vacíos, igual que con los aceites usados. María del Carmen Merino quiso dejar claro que los distribuidores no se niegan a colaborar en el sistema de recogida, pero no quieren que ello les suponga unos gastos que serían imposibles de asumir. Así, aunque la nueva ley exime a los ayuntamientos de la recogida, Aleprove y su matriz nacional, Fedisprove (Federación Española de Distribuidores de Producción Vegetal) pretenden implicarlos para que se creen los citados puntos limpios. Los distribuidores darían a los agricultores toda la información que fuera necesaria. Y además existe un problema añadido. El Real Decreto no obliga a los distribuidores a recoger los envases vacíos, pero sí los considera agentes implicados. Si un distribuidor pone en su almacén un contenedor deberá recoger también los envases que él no ha vendido, lo que puede acarrear problemas. El distribuidor puede insinuar al agricultor que ya que va depositar allí los envases, que no los compre en otro sitio.