Los partidos se pronunciarán hoy en el Congreso sobre la protección del lobo

El debate sobre la protección del lobo vuelve hoy al Congreso de los Diputados. Una proposición de ley impulsada por el PP obligará hoy a pronunciarse a los distintos partidos políticos sobre la posibilidad de sacar al lobo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre) en el que le metió el Gobierno el pasado mes de septiembre a través de una orden para unificar su protección en todo el territorio nacional y prohibir su caza al Norte del Duero donde estaba considerada especie cinegética.

Lo harán después de ver las consecuencias que la ausencia de controles poblacionales está teniendo en la cabaña ganadera, y de las numerosas protestas de los ganaderos en contra de esta orden que ha enfrentado a las llamadas comunidades loberas —Castilla y León, Asturias, Galiciay Cantabria— el Gobierno en una intensa batalla judicial.

Las principales asociaciones conservacionistas ya se han pronunciado al respecto. Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF piden al resto de los grupos parlamentarios que voten en contra de la iniciativa legislativa que en su opinión supone un grave retroceso y la vuelta a un modelo de gestión insostenible y superado, que perjudica a la conservación de la especie y no reduce los daños a la actividad ganadera, además de ir contra el criterio de la ciencia y la Comisión Europea.

La proposición de los populares, que defenderá la diputada Milagros Marcos, quien fuera consejera de Agricultura de la Junta de Castilla y León, pretende que el lobo ibérico vuelva a ser especie cinegética al norte del Duero, con lo que podría ser abatido de nuevo.

La proposición de ley relativa a la conservación del lobo en España y su cohabitación con la ganadería extensiva y la lucha contra el reto demográfico sostiene que, debido a la rigurosas medidas de conservación de la especie, se están creando conflictos crecientes con la ganadería y que esto supone un riesgo no solo para las actividades ganaderas, sino incluso para el mantenimiento de la población en el mundo rural.

Sin embargo, las cinco ONG califican este argumento de «demagógico» y aseguran que no se aporta «la más mínima prueba o evidencia científica que lo sostenga».

A su juicio, el Partido Popular obvia que dichos conflictos con la ganadería son consecuencia del «desastroso» modelo de gestión del lobo que se ha practicado en los últimos 30 años y que ha primado «siempre» su persecución frente a la puesta en marcha de medidas eficaces para su conservación y coexistencia, como la de prevención de daños al ganado o los pagos rápidos y justos para las explotaciones ganaderas afectadas, elementos imprescindibles para lograr una verdadera convivencia entre el lobo y la ganadería extensiva.

En ese sentido, defienden que ese tipo de medidas a través de los fondos europeos disponibles ha sido la principal recomendación de dos cartas remitidas por los comisarios europeos de Agricultura y Medio Ambiente a los correspondientes ministros de Agricultura y Transición Ecológica (febrero de 2019 y noviembre de 2021), que entienden que la principal medida de gestión de la especie debe ser fomentar la coexistencia y reducir los conflictos, frente a su persecución letal y menos como trofeo cinegético.

Por ello, piden a los grupos en la Cámara Baja que rechacen la proposición de ley y trabajen para desarrollar un modelo que garantice la conservación del lobo ibérico, el cumplimento de las obligaciones legales europeas y la coexistencia con las actividades tradicionales presentes en el Estado español.

Fuera estrategias

Asimismo, piden a las comunidades autónomas que abandonen la estrategia «de bloqueo, politización y de judicialización de la conservación del lobo y comiencen a trabajar de manera constructiva y de inmediato en una nueva estrategia estatal».

Igualmente solicitan la puesta en marcha de los correspondientes planes para aprovechar el fondo específico de 20 millones de euros habilitados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y que califican de «oportunidad histórica» para promover la coexistencia del lobo con la ganadería extensiva.

En su opinión el lobo está siendo utilizado como «chivo expiatorio» para justificar la incapacidad de los distintos gobiernos autonómicos de diferente signo político para hacer frente al proceso de despoblamiento y envejecimiento del medio rural.