La alcaldesa de Fabero raclama más apoyo de las administraciones

La alcaldesa de Fabero, Mari Paz Martínez, abogó por más apoyo de las distintas administraciones para poder mantener vivo el patrimonio de las Cuencas Mineras, que quedó abandonado tras el cierre desordenado de las explotaciones mineras, siendo Fabero la última en cerrar en 2018 con la pérdida de 300 puestos de trabajo y de 500 habitantes hasta 2022, por la falta de alternativas.

Fabero ha apostado por rehabilitar el Pozo Julia como alternativa turística como instalación más completa que existe en el municipio. Acusó a los empresarios mineros de no facilitar la cesión del patrimonio minero y, sobre todo, de preocupación por la situación que dejaron tras muchos años de beneficios obtenidos con la minería. «Ha habido una falta total de interés por parte de todas las administraciones», mostrándose muy crítica con esta situación de soledad hacia las Cuencas Mineras, especialmente la de Fabero. «Se habla de inventarios, de poner en valor, la conservación preventiva, el mantenimiento que hasta ahora estamos llevando a cabo con nuestros recursos». «Es verdad —dijo— que han tenido que entrar políticos que han visto que el patrimonio industrial minero es importante y que además supone una salida para las Cuencas Mineras y que pueden servir de revulsivo turístico para las zonas. Por ello se mostró a favor de actualizar todas las actuaciones y ver lo que se está haciendo mal, para poder interactuar en beneficio de todos. Nos hemos sentido muy solos por parte de todas las administraciones en el peor momento histórico de las Cuencas Mineras».

Martínez se mostró satisfecha de que se abra una nueva expectativa para el patrimonio industrial minero, ante el anuncio de las nuevas inversiones avanzadas por la viceconsejera, «para que no se pierdan los edificios emblemáticos e historia de nuestra vida; y, especialmente, para que no se olvide».