Acor adelantará al agricultor 2.000 €/ha en cuanto la remolacha esté implantada

La cooperativa Acor se presenta en esta campaña 2024/2025 con una importante novedad. Adelantará a todos aquellos agricultores que lo soliciten 2.000 euros por hectárea en el momento de sembrar la remolacha y en cuanto el cultivo esté implantado. Así lo confirma el responsable del Servicio Agronómico de Acor, Óscar Olivar. «Una vez que se siembre, un técnico visitará la parcela y en cuanto el cultivo esté implantado se le adelantarán esos 2.000 euros». Se trata de una medida que tiene como objetivo ayudar al productor ya que prácticamente desde la siembra podrá contar con una liquidez para hacer frente a los gastos que conlleva el cultivo.

Hay que señalar que 2.000 euros por hectárea no es una cifra menor ya que se estima que una hectárea de remolacha tiene una rentabilidad, dependiendo de zonas, algo superior a los 3.000 euros.

Olivar hizo un repaso a la campaña que acaba de terminar, que no ha sido sencilla por las especiales condiciones meteorológicas, lo que ha supuesto unos rendimimientos inferiores a los normal tanto desde el punto de vista de producción como de polarización.

Acor comenzó la campaña de arranque de remolacha el 18 de octubre y tuvo que parar el 17 de enero, volviendo a retomarla el 10 de marzo hasta su finalización el 11 de abril. Ello fue provocado, principalmente, por las inusuales abundantes lluvias caídas a finales del año 2023 y principios del 2024. Y también por la temperaturas excepcionalmente altas en esos meses, con prácticamente ausencia de heladas y poca variación entre el día y al noche que afectaron a la riqueza del cultivo y a la aparición de algunas enfermedades.

A fin de campaña, de las cerca de 10.000 hectáreas contratadas pro Acor, de ellas unas 1.000 en la provincia de León, quedaron por recoger unas 200 hectáreas, de ellas unas 110 en la provincia de León, que «esperamos arrancar en los próximos días. Un consejo rector decidirá que se hace con esa remolacha». Ser valorarán distintas opciones y, al final, se tomará una decisión que será buena para el socio, porque somos cooperativa, y buena para Acor», señala Óscar Olivar.

La cooperativa ha recogido este año unas 952.000 toneladas de remolacha con unos rendimientos, como se ha reseñado, algo inferiores de lo habitual ya «que se han juntado varios factores. Los datos agronómicos hasta el mes de agosto eran bastante positivos, pero a partir de ahí cambió. A partir de las lluvias de primeros de septiembre la cercospora entró con una gran agresividad y no se pudo controlar. Y empezamos a ver que la polarización era más baja de lo normal».

Todo esto ha supuesto que los rendimientos en remolacha física no hayan llegado a las 100 toneladas pro hectárea, quedándose en 98 ó 99 toneladas por hectárea. Por su parte la polarización se ha quedado en un 15,5 de riqueza. «Ha sido un año que esperamos que sea al anecdótico».

Desde Acor ya están empezando a preparar la próxima campaña 2024/2025, incluso ya se han comenzado las siembras. «Vemos que va ha ver un crecimiento respecto a la campaña anterior. Ya la campaña de 2023/2024 incrementamos la contratación».

Aunque el responsable del Servicio Agronómico de Acor no quiere entrar a dar cifras, «queremos ser prudentes porque el periodo de contratación todavía está abierto hasta finales de abril o primeros de mayo, pero las 10.000 hectáreas que teníamos este año pensamos que las vamos a superar».

Unos datos que esperan que sigan también la misma tónica en la provincia de León, donde Acor tenía este año unas 1.000 hectáreas contratadas. «Pensamos que vamos a crecer también en León», afirma.

Por zonas, Acor tiene en la provincia de León un 40% de sus hectáreas contratadas en el Páramo, otro 40% en la vega del Esla (incluyendo aquí la zona de Cabreros del Río) y un 20% entre La Bañeza la zona más cercana a Benavente.

En cuanto a los precios, Acor pagará esta próxima campaña un precio mínimo garantizado de 61 euros por tonelada, igual que la campaña pasada, que podrán ser incrementados vía precio o vía retorno.

«La apuesta de Acor es por seguir incentivando al agricultor profesional para que siga sembrando porque es el que mejor sabe producir. A día de hoy no hay ningún sistema capaz de mejorar la capacidad de producir de un remolachero profesional, y la cooperativa va en esa línea. El cultivo de la remolacha tiene un gran interés para el agricultor y va a ser uno de los cultivos estrella en la rotación de regadío y va tener un diferencial de precios respecto a otros. Es rentable, da estabilidad a las explotaciones agrícola y a día de hoy, más cómodo de lo que era hace unos años», concluye Olivar.

En estos momentos la siembras van con un poco de retraso respecto al pasado año, donde buena parte de las siembras se realizaron en marzo. «Nuestra mayor preocupación ahora es que aparezcan las heladas que obliguen a resembrar alguna parcela», señala.