EL FILANDÓN
Diana Belén García: «Me siento arropada por todas las cofradías desde que me presenté»
AL MARGEN. Elude alentar la polvareda levantada en los últimos días por su nombramiento como representante de la Junta Mayor en su cofradía y asegura que el Museo de la Semana Santa cumplirá su función con un poco de tiempo. Piensa que hay relevo generacional y se apresta a vivir a fondo una Semana Santa de intensidad total.
La nueva presidenta de la Junta Mayor respondió a las preguntas de Jesús Rodríguez, especialista en Semana Santa de La 8 León y Miguel Ángel Zamora, redactor de Diario de León.
MIRANDO AL CIELO
La climatología va a marcar buena parte del desarrollo de la Semana Santa. Estamos pendientes de las previsiones pero aún es pronto».
SIN AFANES POLÉMICOS
. «Di el paso de optar a la presidencia consciente de que la Semana Santa es un mundo muy particular y hay que quererlo mucho. Yo me siento plenamente arropada por todas las cofradías, desde el minuto en que me presenté como candidata. Me veo como una más y esa es la filosofía de trabajo de la Junta Mayor», explicó en torno a las polémicas internas en su cofradía por su elección como representante. «Todos somos iguales en el trabajo cotidiano pero hay singularidades que hacen grande la Semana Santa»
ARGUMENTOS
A la hora de explicar los motivos de su candidatura, señaló: «Yo colaboraba con la Junta Mayor desde que dejé de ser abadesa de mi cofradía. Solía llevar la web y la actualización y el trabajo dio fruto. Me daba rabia que esos se perdiera. Peor hay más gente que colabora. Hemos renovado el 50% de la Comisión Permanente. Hay que engrasarse y hay que empastar», señaló. «Las turbulencias son inevitables, estamos hablando de personas. La Junta Mayor interviene cuando se le requiera porque cada cofradía es soberana en su gestión. Hay que tender puentes. Unos lo intentan resolver de puertas adentro y otros lo llevan a otros ámbitos».
CONTINUIDAD
. Llámese religión y llámese sentimiento, la presidenta tiene claro que «nadie se mete bajo un paso a sufrir cuatro horas si no hay un sentimiento o una devoción. Cada vida tiene sus circunstancias. No es lo mismo ver una procesión con 2.000 personas que ver a 60 fieles en una iglesia. Puede haber perfectamente un papón y es otra forma de sentir lo mismo», dijo.
CONTINUIDAD
. La política de altas y bajas de las cofradías está equilibrada: «Hay muchas incorporaciones pero no de gente en edad de pujar, hay que esperar unos años».
CONTABILIDAD
De los 20.000 papones que se aseguraba tradicionalmente que tenía León se ha pasado a una estimación de 10.000 «Eso requiere un análisis posterior. Habría que hacer una tarea pendiente para saber cuántos papones compartidos existen».
ADIÓS A LOS RECELOS
. «Se ha acabado ya esa tensión de la pandemia y parece que este año ya no hay miedo a salir. Hay que disfrutar de los 400 desfiles procesionales que hay previstos. También de los que son menos conocidos. Estamos haciendo labor de promoción fuera de León y lo vamos a retomar», explicó.
SIEMPRE GENARÍN
. Como papona «me da rabia que la Semana Santa de León se conozca por el Genarín. Pero hay que convivir y ni uno es tan bueno ni otro es tan malo, hay que compartir espacios y referencias. No todo es Genarín y no todo es procesión, la voluntad es compartir espacio con respeto. El problema son los que vienen a provocar desavenencias».
ENCUENTRO NACIONAL
. «Vinieron 400 personas desde fuera y van a hacer mucha promoción. Se quemaron muchas energías, cierto, pero salió muy bien», aseguró la presidenta.
IMAGEN
. Diana es partidaria de recuperar el orden en las procesiones «sin espectadores que se crucen y con respeto a la uniformidad por parte de los papones. Viene en los estatutos y clama al cielo tener que recordarlo».
MUSEO
. «Las cosas salen porque se trabajan», aseguró la presidenta «y como ganas de trabajar nos sobran, creo que es un asunto en el que creo que vamos a conseguir un concierto de voluntades, el que es necesario. Para eso necesitamos pensar en una Semana Santa para todo el año. También necesitamos un poco de tiempo».