jaguar
Diseño... navegable
El estilo «acuático» del XF Sportbrake. Jaguar traslada al diseño «navegable» una de sus últimas realizaciones, el familiar Sportbrake, que presta su ADN estilístico a un producto alternativo, en el que priman la velocidad y la belleza.
Botadura inesperada… para la ensoñación. No es el sueño del coche que navega, aunque se le acerque. Tampoco está previsto, al menos de momento, que la consultora de diseños navieros Seventy Seven Design, vote por botar este exclusivita bote que Jaguar traslada a la realidad de la ficción en clave XF Sportbrake. Aunque… ahí queda la idea.
El caso es que Jaguar acaba de firmar el proyecto «Concept Speedboat», en colaboración con dos compañías especialistas en el diseño de barcos.
El resultado se traduce en un casco de fibra de vidrio recubierto de resina de poliéster y acabado, en su parte superior, con una cubierta en madera de teca dividida por una aleta de fibra de carbono inspirada en la del emblemático D-Type de los años cincuenta. Toda una evocación…
La proa de la embarcación fluye, sin solución de continuidad, hacia el parabrisas; mientras que la roja cabina «2+1» viene a reflejar la histórica tradición deportiva del Gran Gato.
Incluso el mítico legado de Jaguar se ve también acentuado por los tapones de llenado del depósito de combustible en la primera generación XJ, a la vez que una hélice de aluminio y una bita de amarre imitan cómo la lancha podría impulsarse y amarrarse respectivamente.
El nuevo familiar Sportbrake es la variante más versátil de la gama XF, con el que el fabricante ha querido representar una atractiva combinación de musculado diseño y efectivo comportamiento dinámico, exclusivamente propulsado por un amplio abanico de potentes y refinados motores diésel.
El tren trasero recibe la fuerza de propulsión a través de una también nueva caja de cambios automática de 8 velocidades, con mando secuencial; a la vez que el motor de 2.2 litros está dotado con sistema «Start&Stop» de arranque/parada automática en detenciones prolongadas.
La segunda posibilidad mecánica de la gama XF Sportbrake viene dada por el V6 de 3.0 litros, en versiones de 240 y 275 CV, disponible desde 50.850 euros. (2.2 Diésel Classic de 200 CV).
El único modelo familiar en los catálogos de Jaguar, ofrece 550 litros de capacidad de maletero, sólo una decena más que la berlina homóloga, aunque la posibilidad de abatir los respaldos traseros permite llegar hasta los 1.675 litros en una zona de carga muy plana y especialmente cuidada.
Además, la nueva forma de la carrocería, con una caída menos acusada en la línea de techo, propicia mayor espacio para los ocupantes de las plazas traseras.
Además de la suspensión neumática trasera autonivelante, que mantiene constante la altura de la carrocería cuando el coche va cargado, el portón trasero monta un sistema de cierre asistido y también pude elegirse opcionalmente un sistema de apertura/cierre automático que multiplica la practicidad de uso.
En suma, que Jaguar combina así, en clave de concept, la tradicional imagen de una lancha rápida con las típicas características de los modelos de la marca.