Así se fabrica…
Las carreras, y su particular ‘ADN’, han inspirado la creación del R8 de serie, que poco tiene que envidiar a su hermano… «de la pista a la calle».
‘A mano’ … así fabrica el nuevo R8 la compañía subsidiaria «quattro Gmbh» (propiedad de Audi) en el también nuevo complejo «Böllinger Höfe» (30.000 metros cuadrados, 492 empleados), que cuenta con una pista de pruebas en la que se somete a un estricto control de calidad/rodaje cada unidad producida. Audi continúa confiando en su ‘indispensable’ sistema de construcción ASF (aluminio y fibra de carbono reforzada con plástico CFRP) sólo que ahora, en el caso del nuevo R8, los especialistas sueldan manualmente los elementos que conforman la estructura ‘Space Frame’ ASF, compuesta de un módulo frontal, la sección central de suelo y el módulo trasero, todos ellos realizados con piezas de aluminio fundido y perfiles extruidos; después, estos tres módulo se unen a la parte inferior.
Ahí va… para los amantes de las ‘cifras estadísticas’ : 89 metros de soldadura de aluminio, 270 remaches semitubulares, 207 remaches ciegos, 241 tornillos métricos y 270 tornillos autorroscantes… en cada R8; y para ‘redondear’ , un revestimiento catódico por inmersión, un adhesivo específicamente desarrollado y un aislante especial, para evitar el desplazamiento de las aleaciones metálicas en las áreas de contacto con el CFRP. Consecuencia: ‘romana’ rebajada, un 40% más de rigidez torsional, más seguridad en caso de impacto y reducción de vibraciones; pues eso…